Daniel tiene 35 años y considera que el amor romántico es un artificio fomentado por las películas de Hollywood, una mentira que solo sirve para generar expectativas irreales en millones de personas.Mientras busca un tema para su primera novela, Daniel se gana el sustento escribiendo biografías de magnates. Así es como conoce a Eva, la hija de un empresario que vive alejada de la fortuna de su padre, y de la que se enamora inmediatamente. De la noche a la mañana, su vida se ve convertida en una de esas comedias románticas que él tanto odia. Lo peor es que empieza a gustarle. T.G.