Anna Hope compagina su actividad literaria con su carrera como actriz, ésta es su primera novela. La autora describe la historia de tres mujeres y cómo la guerra ha transformado sus vidas: pasado, presente y futuro se funden para formar una herida abierta que impide toda posible liberación. Cinco días a partir del domingo siete de noviembre de 1920, la ciudad se prepara para recibir el cuerpo del Soldado Desconocido, estas tres mujeres intentan sobreponerse a algo tal vez incurable. La guerra parece haber establecido un extraño nexo de unión entre madres, esposas, amantes, hijas€ Víctimas de una amputación cuyo dolor fantasma les persigue.
A través del personaje de Hettie descubrimos el mundo de las instructoras de baile, las jóvenes que se alquilan como parejas de baile en los clubs nocturnos, Evelyn nos muestra el horror de los ex combatientes que luchan ahora por recobrar una normalidad cercenada para siempre, y a través de Ada sentimos el dolor de una madre que convive con el fantasma de su hijo desaparecido en combate. En la descripción de los episodios de neurosis de guerra que observa Evelyn, en su trabajo administrativo diario, comprobamos cómo el horror deja huellas extraordinariamente feroces, crueldad máxima que el cuerpo soporta pero que mancilla el alma o lo más profundo de quien ha logrado sobrevivir en cuerpo a la visión más extrema del ser humano y la barbarie, pero cuya percepción ha quedado alterada de por vida ("Después nos fuimos. Y entonces fue cuando comenzaron los temblores. Me ponía a temblar y no podía parar. Y no me notaba el brazo. El brazo con el que había disparado. Dejó de moverse, y ya nunca más he vuelto a moverlo").
Hope nos ofrece una visión distinta, vemos ahora este lado de la historia desde la visión femenina, desde su dolor y vivencias: "La idea para Despertar se me ocurrió leyendo sobre la historia social de las mujeres a principios del siglo xx [€] quería descubrir por qué y qué había hecho la guerra por ellas. No encontré muchos libros que abordaran la guerra desde el punto de vista de las mujeres. De modo que decidí escribir sobre el tema". Visión, estudio minucioso y documentado, necesario para poder observar y analizar la historia con total amplitud, de un modo más exacto, más verdadero, menos condicionado. Novela lejana a todo sentimentalismo, de sensibilidad máxima pero con el pudor que toda autopsia bien realizada exige, ese rigor, esa mirada aséptica pero sensible hacia el cuerpo sobre el que actuamos. Historia que posee la facultad sanadora de toda narración oral, la liberación de ser contada, la necesidad misma de la propia historia de la humanidad de ser conocida, trasladada al otro, exorcizar a modo de catarsis: "Ahora, de pie en el frío de la calle, Evelyn comprende algo. Que este encuentro es lo que ha estado esperando: que alguien compartiera su verdad con ella. Después de cuatro años de guerra y otros dos años de excombatientes día sí y día también, es lo que quería, es lo que buscaba. La verdad de alguien. No su alegría, no su valor, no su rabia, no sus mentiras. Y en cuatro años de guerra y dos años de posguerra, nadie - ni Fraser, ni su hermano-, nadie ha compartido con ella su verdad". La verdad os hará libres€
