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El antes de Magallanes y el después de Elcano

Mientras el portugués fallecía en el viaje, el español apenas pudo disfrutar en vida de la gloria proporcionada por la histórica hazaña

de Juan Sebastián Elcano.

El Fernando de Magallanes que convenció a Carlos I para que financiase aquella expedición que abriría la nueva ruta comercial de las especies, era ya un navegante consagrado, aunque polémico. Nacido en 1480 en una feligresía de Oporto, a los 25 años de edad se alistó en la Armada portuguesa de la India donde participó en numerosas acciones militares. Después de varias peripecias, se radicó en Marruecos, siendo acusado de comerciar ilegalmente con los moros. De regreso a Lisboa, se dedicó al estudio de las cartas de navegación que le inspiraron la audaz propuesta realizada al monarca español. Infelizmente, Magallanes que sí pudo demostrar que tenía razón, no pudo disfrutar de las lisonjas de la gloria...pero tampoco el comandante que le relevó tras su muerte, Juan Sebastián Elcano, nacido en Guetaria, Guipúzcoa en 1476.

Pese a la magnitud de la hazaña, reconocida por el propio rey , Carlos I no se mostró especialmente generoso con Elcano. Le denegó sus peticiones de título nobilario, el hábito de caballero de la Orden de Santiago (el mismo que tenía Magallanes), la Capitanía Mayor de la Armada y un permiso para poder llevar armas, y solo accedió a concederle una renta anual de 500 ducados en oro, suma realmente importante y, como escudo, una esfera del mundo con la leyenda en latín: "Primus circumdedisti me" ("El primero me circundaste").

En 1525, Sebastián Elcano volvió a la mar, y se convirtió en un miembro de la segunda expedición hacia las islas Molucas, constituida por siete barcos. Nombrado capitán y líder junto con García Jofre de Loaysa, ambos fueron enviados a reclamar para la Corona de España las Indias Orientales . Elcano, Loaysa y muchos otros marineros murieron de desnutrición y escorbuto (año 1526 en el Océano Pacífico), pero los sobrevivientes llegaron a su destino y algunos de ellos lograron regresar a España , completando la segunda vuelta al mundo en la historia.Sebastián Elcano nunca se casó, pero tuvo un hijo con María Hernández Dernialde, llamado Domingo Elcano, al cual legitima en su última voluntad y testamento. En 1572, para conmemorar el 50 aniversario del viaje, el rey Felipe II concedió a los herederos varones de Sebastián Elcano el título hereditario de marqués de Buglas.

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