El lobo, como buen carnívoro, es un depredador. Pero eso no significa que sea un animal agresivo por naturaleza como se le ha juzgado en la mitología clásica en multitud de ocasiones. Según la cultura mitológica de los griegos, Licaón, rey de Arcadia, es convertido en lobo tras tratar de alimentar al dios Zeus con carne de su propio hijo.
En "defensa" de este mamífero salió el naturalista y divulgador Félix Rodríguez de la Fuente en los años 70. Defendió "la verdad del lobo" en un momento en el que se le consideraba un animal enemigo del hombre.
Francisco Santiago López y Chisco Lema son verdaderos discípulos de la filosofía de Rodríguez de la Fuente respecto al lobo y llevan años observando a las diferentes manadas que persisten en los montes de la Costa da Morte. Crecieron con los documentales de animales y en un momento en el que los jóvenes disfrutaban de la naturaleza de otra manera.
Ambos son vecinos de Corcubión y han elaborado una serie de vídeos con una amplia voluntad didáctica que pretenden acercar a la sociedad la "vida privada" de estas manadas, lo que hacen cuándo nadie los ve y cómo se comportan entre ellos.
"Queremos desmitificar el miedo social hacia el lobo. Hablar de este animal como una alimaña, como se ha hecho en múltiples ocasiones, me parece algo muy arcaico", asegura López. "Creo que la manera más fácil de transmitir cómo es una especie es mostrar lo que ves cuando consigues observarlos en su hábitat", añade Lema.
Lema lleva desde 1994 saliendo de madrugada hacia las montañas de su zona para observar de lejos a estos lobos. "Voy descubriendo cosas que nunca pensé que llegaría a ver en directo; determinados comportamientos que veía en los documentales pero que pensaba que eran escenas preparadas con animales amaestrados", detalla.
Pero conseguir captar esos momentos requiere mucho tiempo y, sobre todo, paciencia. "A nosotros nos gusta mucho estar en el campo, no nos aburrimos en ningún momento pero a veces puedes hacer hasta tres horas de espera y no conseguir grabar nada que sea relevante", destaca López, "es una afición que nos cuesta tiempo, dinero, y a veces alguna bronca en casa, pero que nos satisface mucho".
Coinciden en que "superar lo que hizo Rodríguez de la Fuente es muy difícil", pero con los vídeos que han colgado en Youtube, con el perfil de SignatusFilms, lo que buscan es normalizar, o quizá suavizar, la relación de la gente de la zona de la Costa da Morte con esos animales.
"El lobo es un verdadero superviviente, tiene mucho mérito que siga habitando una zona tan manipulada por la mano del hombre", señala López. "En realidad, están muy cerca de las casas pero como por el día se resguardan en sus escondites no les vemos", apunta Lema.
Su serie de documentales ha llegado a las aulas de los colegios de la zona, donde los alumnos asisten atónitos a la imágenes de estos animales sin acabar de creerse que viven tan cerca de ellos. Uno de los mayores problemas para los lobos en la Costa da Morte es la escasez de presas, por eso con frecuencia atacan al ganado. "Cabreando con razón a quien sufre las pérdidas", cuenta Lema.
Él colabora ahora con un grupo de expertos y con estudiantes de biología que quieren estudia al animal en su hábitat. "Estamos intentando tipificar cada uno de los individuos, ya se han mandado muestras para realizar análisis de ADN y poder contabilizar los ejemplares que tenemos aquí", explica Lema.
"Nuestro objetivo, además de limpiar la imagen del lobo, es poner en valor el patrimonio de la Costa da Morte", zanja López.
