Es una de las hortalizas más producidas del mundo, presente en muchas mesas sola o como acompañante. Además de su fama para la piel (se dice que ayuda a broncearla) y de sus beneficios para la vista, la zanahoria forma parte de ese grupo de alimentos de los que no se debe prescindir en la dieta diaria por sus diversas propiedades.
Asia es la mayor productora seguida por Europa y Estados Unidos. En España, su consumo creció un 4% en los tres últimos años, según datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Es una buena noticia porque entre sus propiedades nutricionales destaca su alto contenido en agua (88%), y en fibra y minerales, entre los que se encuentra el sodio, el potasio y el calcio. También el yodo y es la verdura con mayor contenido en vitamina A. Cuenta igualmente con cantidades de vitaminaB6 y C. Con estos ingredientes aporta antioxidantes, fibra y tiene buenas propiedades para el aparato digestivo y la salud de la vista. Su temporada de recolección y mejor época de consumo tiene lugar durante todo el año, aunque especialmente entre los meses de mayo a enero.
La zanahoria (Daucus carota Subs. Sativa) pertenece a la familia de las Umbelíferas, especie Daucus Carota. La parte comestible es una raíz pivotante engrosada de color anaranjado. Se pueden consumir solas o como ingrediente de numerosos platos salados y dulces: enteras, troceadas, ralladas, cocidas o en puré, licuadas, como aperitivo, ingrediente de ensaladas o bebida refrescante, en cremas y pudines, en guisos y estofados, etcétera. Por su sabor dulce, se utilizan también como ingrediente de postres: tarta de zanahoria, pastel de zanahoria, bolitas de zanahoria con coco rallado y un sinfín de posibilidades.
Se deben seleccionar las de piel suave y de pequeño o mediano tamaño, bien formadas, de color naranja vivo, con un estrechamiento uniforme y que no presenten raicillas laterales. Si tienen hojas, éstas deberán estar frescas y tener un buen color verde. Se conservan bien varias semanas en lugares frescos. En la nevera se mantienen hasta dos o tres semanas.
