Vaya por delante mi fiel devoción al Rallye Rías Baixas. Un rallye que marcó mi vida profesional, ya que desde la primera vez que acudí a uno de sus tramos nació mi pasión por el mundo del motor. Hoy, gracias al "Rías" puedo disfrutar de mis dos pasiones, escribir y el mundo de los coches". ¿Qué más se puede pedir?.
Cuando me preguntan por mis recuerdos del "Rías", me vienen a la mente aquellas ediciones nocturnas en Fornelos, cuando oías el rugir de los motores acercándose al control. En la oscuridad de la noche, los discos de freno al rojo vivo servían de iluminación para que los comisarios anotaran los tiempos. Daba igual que hiciera frío, que fuera noche cerrada, pues el espectáculo nocturno del "Rías" compensaba todos los sacrificios.
Ningún deporte en nuestra ciudad, ni en toda Galicia, movía tantos aficionados como el Rías Baixas. Gallegos, asturianos, leoneses y portugueses se citaban año tras año durante dos días en nuestras carreteras para disfrutar de un histórico. Y todo ello, sin contar con los beneficios económicos que dejaban en la hostelería y tiendas por dos transcurría la prueba más importante de la Comunidad.
Que el "Rías" es algo más que un simple rallye, lo demuestra el hecho de que año tras año, la Federación Española de Automovilismo lo encuadraba en la lista de mejores pruebas del nacional. Un premio que todo el mundo quiere, pero que muy pocos tienen.
Espero, y deseo, que la no celebración de la edición de este año no signifique su desaparición, ya que sería la peor noticia que podría recibir el deporte vigués.
La supervivencia del rallye tiene que ir más allá del ámbito local. Ahora que se habla de la constitución del Área Metroplitana, es este organismo quien debe dar el primer paso para que no se acabe. Es evidente, y está claro, que el deporte no debe sobrevivir de las subvenciones, pero también es justo poner sobre la balanza lo que supone para cientos y cientos de niños ver las carreras de coches. Insisto, el Rallye Rías Baixas es algo más que una prueba deportiva, es una marca, un distintivo que identifica una zona con el mejor deporte del motor del país. Todavía hay tiempo para darle la vuelta a la situación. Reflexionemos.
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