Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La leyenda está de cumpleaños

El BMW M3 cumple treinta años desde que hiciera su aparición en el Salón de Fráncfort de 1985

Las cinco generaciones del BMW M3 posan en el Circuito del Jarama. // Álex Aguilar

El 12 de septiembre de 1985, en el Salón de Fráncfort y tras intensas sesiones de pruebas en algunos de los circuitos más exigentes del planeta, se presentó al público el primer BMW M3 de la historia. Han pasado más de tres décadas desde entonces; 30 años que han servido para consagrarlo como el automóvil de referencia en su categoría, que es la de las berlinas, coupés y descapotables del segmento medio con motores de gran potencia.

El nuevo motor que equipó la primera generación del BMW M3 tenía mucho en común con el que utilizó Piquet en 1983. Ambos estaban desarrollados sobre la base del propulsor de cuatro cilindros de 2.000 cc que se fabricaba en grandes series y compartían bloque. La decisión de montar una motorización de cuatro cilindros en lugar de uno de seis cilindros, que ya se utilizaba en el BMW Serie 3 desde 1977, tiene varias explicaciones. Se quiso ahorrar el máximo peso posible y, además, el cigüeñal de mayor longitud del motor de seis cilindros tenía tendencia a vibrar antes a altas revoluciones que el de cuatro cilindros.

El siguiente capítulo en la exitosa historia del BMW M3 se escribió en 1992, cuando salió a la venta el E36 desarrollado sobre la base del BMW Serie 3 Coupé E36. La fórmula empleada por los ingenieros de la marca para este modelo cambió con respecto a la de su antecesor, ya que optaron por un diseño exterior que, aunque lucía toques deportivos específicos, se alejaba del espíritu de carreras del M3 E30. Se optó por presentar un coupé de elegante imagen, sin estridencias, dotado con un motor muy potente.

Fue la primera ocasión en la que un BMW M3 montaba un motor de seis cilindros en línea. Su propulsor de 2.990 cc suponía un incremento de casi un tercio en la cilindrada en comparación con el motor de cuatro cilindros en línea y 2.302 cc del anterior M3.

En octubre del año 2000, se presenta la tercera generación del BMW M3, que esta vez estaba basada en el BMW Serie 3 Coupé E46 que había sido introducido en abril de 1999. El nuevo modelo adoptó una imagen más diferenciada con respecto a los demás modelos de la Serie 3, con un diseño más dinámico que retomó parte de los rasgos estéticos del BMW M3 E30.

En el perfil de la tercera generación destacaba la presencia de unas nuevas branquias (con el emblema M3 y ubicadas sobre las aletas delanteras), de unas taloneras diferentes, de los característicos y aerodinámicos espejos retrovisores y de unas llantas de aleación de nuevo diseño.

La cuarta generación del BMW M3 fue anticipada por primera vez con el prototipo que BMW presentó en el Salón de Ginebra de 2007, que nos adelantó gran parte de las características que definirían al sucesor del modelo más famoso creado por BMW M GmbH. Desarrollado sobre la base del BMW Serie 3 Coupé (E92) del momento, sorprendió al público no solo por su diseño exterior específico (que únicamente compartía con el modelo convencional las puertas de acceso al habitáculo, la tapa del maletero, los faros delanteros y los pilotos traseros); también porque bajo su musculoso capó se escondía un motor V8, en lugar de un seis cilindros como el que montaron sus antecesores más próximos.

El último episodio en la exitosa historia del BMW M3 llegó en diciembre de 2013, con la presentación de la quinta generación, desarrollada en esta ocasión sobre la base del BMW Serie 3 F30. Era la primera vez que se presentaba simultáneamente la variante con carrocería de cuatro puertas y el coupé, si bien, este último, siguiendo la lógica de denominación de modelos de BMW, pasó a llamarse BMW M4 Coupé, que ocupó el lugar que dejó el BMW M3 Coupé E92 así como sus antecesores de dos puertas.

Compartir el artículo

stats