>> Si el camino es la vida, pocos como él lo han llevado tan radicalmente a la práctica; pocos en Galicia o en España podrían superar su bagaje viajero. Contados españoles han conocido 107 países, algunos repetidamente y casi siempre como guía. A pesar de llevar 44 años vinculado profesional y emocionalmente al mundo de los viajes, su vida en el mundo del turismo comenzó casi de rebote. Finalizado el bachiller en el año 1965, comenzó a estudiar la carrera de Ingeniero Técnico en Electricidad, pero su absoluta falta de vocación le obligó a abandonar. La carencia en Vigo de otras opciones, le llevó hasta la carrera de Técnico en Empresas Turísticas en la Escuela de Turismo San Jorge, que se convertiría en su segunda casa, y donde en el año 1970 finalizó con éxito la carrera que marcaría su destino.Su primer trabajo en una agencia de viajes fue en 1971, y un año mas tarde, con solo 22 años fue ascendido a director de la sucursal en Vigo de Viajes Linemar. A partir de aquí, una larga carrera repartida entre agencias minoristas, agencias mayoristas, oficinas profesionales de congresos (OPC,s), agencias de turismo receptivo€ de una en una, y en ocasiones atendiendo a todas al mismo tiempo. Y todo esto, desde 1999, mezclado con su faceta de experto comunicador en el densísimo mundo de los viajeros del mundo, grabando reportajes en países lejanos, y ofreciéndolos al publico a través de televisiones locales. Así lo cuenta.
>> "Nací en Vigo en octubre de 1949, en el seno de una familia de clase media de la época, formada por mis padres, Manuel Fernández Parcero y Carmen Díaz Baño, y mi hermana Cuela, poco más de un año mayor que yo. Mi madre era una maestra que no ejercía, y mi padre empleado de Fenosa, pero básicamente un purísimo sindicalista, honrado a carta cabal, que con los años llegaría a ser presidente del Consejo Provincial de Trabajadores. Disfruté de una infancia feliz en la calle Venezuela. Hasta los 7 años estudié con las monjas en el colegio de La Enseñanza, y a esa edad entré el colegio Maristas del Pilar, donde terminé el bachillerato con razonables buenas notas. Tras un malogrado paso de dos años por la escuela de Ingenieros Técnicos, con gran ímpetu y buenos resultados, entre 1966 hasta 1970 estudié la carrera de Turismo en la Escuela Oficial de Turismo San Jorge, en su momento un ejemplo de organización y bien hacer. Gracias Ana María Areán y Juan Manuel López Chaves, propietaria y director respectivamente!"
>> "Estudiando Turismo, como era lógico, los veranos se repartieron entre París y Londres para poder practicar estos dos idiomas. Especial relevancia tuvo para mí el verano de 1969. A finales de junio llegaba yo a París, con un billete de regreso para finales de septiembre, y pocos miles de pesetas en el bolsillo. Comencé trabajando de conserje de noche en un hotelucho en el Barrio Latino, pero los chinches que había en el cojín del asiento de recepción me echaron a la calle. Un golpe de suerte quiso que a través de la Agregaduría Laboral de la Embajada Española, consiguiese un fantástico trabajo de recepcionista en el Centro de Acogida para emigrantes españoles sin trabajo, situado en Boulevard de L´Hopital, que además incluía un mini apartamento en el ático del edificio. Para un chico de 18 años, español de clase media de la época franquista, que ni siquiera conocía exactamente el significado de la palabra democracia, aquello supuso una carrera acelerada de europeísmo. Mis colegas franceses me aconsejaban que, cuando fuéramos a una discoteca, nunca dijera que era español porque ¡estaba muy mal visto!; obligatoriamente yo debería ser mexicano€ Así sí podría ligar. Y para darle más contenido a mis clases de europeización, a mediados de julio, Franco nombra su sucesor al frente del Estado Español, al entonces Príncipe Juan Carlos. Los miles de españoles exilados en París, republicanos, comunistas e incluso monárquicos, saltaron como resortes, y estuvieron varios días rodeando los centros oficiales, incluido el nuestro, mostrando su enérgica protesta e incluso amenazando".
>> "En el año 1974, ya plenamente imbuídos por el ánimo democrático y rebelde, contraigo matrimonio con Xela Gil Suárez, licenciada en turismo, bancaria de profesión, pero de vocación tan viajera como la mía. En los 27 años que duró nuestro matrimonio hasta su fatal fallecimiento en 2001, primero los dos solos, y más tarde acompañados alguna vez por nuestra única hija Iria, recorrimos y profundizamos en 5 países de Asia, 4 de África y 6 de Europa. En 1978 comienzo mi experiencia profesional en viajes a otros continentes, aspecto de mi profesión que poco a poco me va calando más y más hasta casi convertirse en una adicción. Conocer el mundo, tener vivencias en lugares muy distantes y diferentes, saber como se vive, como se disfruta, y por qué se sufre en los distintos lugares del mundo, es la única posibilidad de saber aconsejar a los clientes lo que de verdad desean. Cuanto más mundo conocía más me atraía la idea de ayudar a mis clientes a convertirse en viajeros en vez de ser solamente turistas. El turista viaja a muchos lugares, saca fotos y visita monumentos; el viajero da un paso más, se mezcla con las gentes del lugar y mete su mano hasta el codo para conocer todo lo que allí hay. Pero para alcanzar este grado de viajeros, se precisa de la ayuda de un profesional bien formado, que conozca esos lugares y sepa trasmitirlo. Y eso es lo que siempre quise. En una palabra, alcanzar el auténtico espíritu del viajero. Un viajero sin capacidad de observación es como un pájaro sin alas".
>> Su primer viaje de larga distancia fue a Cuba en 1978 y 1979 para participar en unas sesiones de trabajo con el naciente turismo cubano. Siguieron en 1980 Tailandia, y Hong Kong, un año más tarde Argentina€ y un larguísimo etcétera hasta los 107 países que desde entonces ha recorrido hasta hoy. Varios hechos han marcado su vida laboral y su experiencia viajera. Desde que en 1975 asumió la dirección técnica de Ultratur agencia de viajes, empresa altamente relacionada con los viajes que generan los cambios de tripulaciones de los marineros que trabajan en los grandes pesqueros gallegos, debió profundizar en todo lo relativo con esos viajes para alcanzar o regresar de sus barcos. Las primeras experiencias le llevaron hasta Walvis Bay, puerto situado en la actual Namibia. Corría la década de los 80 y a mediados del mes de diciembre, ya próximo a las Navidades, 75 tripulantes pertenecientes a 4 barcos de dos armadoras españolas, desembarcaron en el puerto de Walvis Bay, y el avión en que deberían viajar hasta España fue cancelado por causas de fuerza mayor. Las compañías no ofrecían solución hasta el 4 de enero. Y aquí comenzó su primera experiencia en Sudáfrica y Namibia: voló hasta Johannesburgo, desde aquí hasta Windhoek, y desde la capital de Namibia, en un jeep 350 kms. hasta Walvis Bay. Una vez en suelo africano, debió contratar un vuelo chárter que situase a los 75 marineros y a él mismo en el aeropuerto de Johannesburgo que era el que mayor número de vuelos de distintas compañías tenía cada día con Europa. En 4 días los 75 y él mismo estaban de regreso en España€ antes de las Navidades.Motivos similares, en relación con los cambios de tripulaciones de marineros de nuestros grandes buques congeladores faenando en puertos lejanos, le han hecho viajar a Montevideo, Buenos Aires, Punta Arenas en América del Sur, a Maputo y Beira en Mozambique, y a Ciudad del Cabo en Sudáfrica.
>> "En 1995, junto a dos colegas, tomamos la decisión de crear nuestra propia agencia, Karma Viajes, y desarrollar dentro de ella las tres grandes especialidades que habíamos alcanzado: el tráfico de marineros; la atención a congresos y convenciones; y el turismo de calidad, ese que trata de enseñar el mundo en profundidad. Pero el hecho de mayor trascendencia profesional y repercusión mediática en mi vida, tuvo lugar a finales de 1999. El creciente deseo de la sociedad española por conocer el mundo, y lo absolutamente abandonado que estaba el sector de las personas solitarias (individuales o parejas), me llevaron a poner en marcha un programa de viajes especiales para viajeros, pero siempre acompañados por un experto que les ayudara a penetrar en profundidad en el destino elegido, que les sirviera de intérprete, de guía y de solucionador de los distintos problemas que se presentasen. Así, personas que nunca se atreverían a visitar solas un país, tendrían la oportunidad de hacerlo en compañía de otros viajeros como ellos (hasta un máximo de 30 personas), y acompañados por un experto. Así nació el Club Viajeros Solitarios y el 13 de mayo de 2000 salía el primer grupo de 28 ya pertenecientes a este club, que como primer destino habían elegido el enigmático Egipto. A este viaje siguieron otros por Asia a través de China, Tailandia, Vietnam, Camboya, Myanmar, Hong Kong, Tíbet, India del Norte e India del Sur, Nepal... o por Medio Oriente y Asia Central a Egipto, Siria, Jordania y Uzbekistán; o por América a Alaska, Canadá del Este y Canadá del Oeste, Estados Unidos Costa Oeste y Costa Este, México... o por Oceanía a Nueva Zelanda; y por Europa, a España, Francia, Italia... Así, hasta el día de hoy, un total de 87 viajes, acompañando a mas de 2.100 personas".
>> "En 1999 Televigo nos ofrece la posibilidad de colaborar con ellos en un magazine en directo conducido por el buen periodista Manolo López Prado, y cada noche de jueves disponía de 15 minutos para dirigir propuestas de viajes atractivos a la audiencia.En el año 2001 desaparece ese programa y la dirección de Televigo me propone que cree, dirija y presente uno mío. Así nace Viajeros, un programa de reportajes por el mundo y entrevistas, que se convierte en el mas fiel seguidor del Club Viajeros Solitarios por los 5 continentes. Hasta 2014 el programa permaneció en Televigo, y en noviembre de ese año comenzó a emitirse en Localia, donde sigue en la actualidad. No puedo omitir que, tras quedarme viudo, en 2002, en un viaje a Nueva Zelanda conozco a Maribel Gálvez Montiel, agente de viajes sevillana, que ejercía y vivía en su ciudad. Tras más de año y medio de continuos viajes Vigo - Sevilla, o Sevilla - Vigo, en 2004 se traslada a Vigo, donde sigue ejerciendo como experta y eficaz agente de viajes, y se convierte en mi inseparable compañera. Una de las mayores coincidencias entre ambos es la pasión por viajar, y muy especialmente a África. Juntos hemos recorrido en repetidas ocasiones Kenya, Tanzania, Bostswana, Namibia y Sudáfrica. Como resultado de este amor por el continente africano y entre nosotros, en abril de 2008 contrajimos matrimonio por el rito Masai en un poblado en el Área de Conservación del Ngorongoro, en Tanzania; a la gran fiesta, además de 30 amigos españoles, acudieron mas de 100 guerreros de los poblados cercanos, que danzaron para nosotros."
>> "En noviembre de 2012, producto de una mala participación de Karma Viajes en una empresa externa, nuestra agencia desaparece, y se abre una oscura etapa de 3 años trabajando para una agencia de viajes vasca, que poco o nada entendió ese Espíritu del Viajero con el que nació el Club Viajeros Solitarios. Recuperado finalmente el control y la propiedad del Club Viajeros Solitarios, a los 66 años mi ánimo por continuar recorriendo el mundo, y ayudando a volver viajeros al mayor numero de turistas, permanece intacto y les aseguro que con el mismo ánimo de los cincuenta años. Mi vida profesional continúa pegada al precioso proyecto de los Viajeros Solitarios, hoy convertido en toda una realidad.2016 verá renacer al primitivo y original Club Viajeros Solitarios, que en su nueva etapa estará integrado en un ambicioso proyecto absolutamente gallego, pero con vocación universal. Al frente de ese renovado Club, tendré la oportunidad de seguir conduciéndoles por los más recónditos e interesantes rincones de nuestro tan amado Planeta Azul.
El saltó de Mamá Guepardo
- " Una experiencia excepcional nos sucedió durante un safari atravesando la reserva de Masai Mara; nuestros 3 jeeps con el techo abierto, se pararon para observar el panorama, y sin previo aviso una mamá guepardo, de un salto se colocó sobre el techo de uno de nuestros coches, para poder vigilar a su hijo que dormitaba entre unos matorrales.. Las sensaciones fueron increíbles, y las cámaras de fotos agotaron sus tarjetas".En el estado mexicano de Chiapas, recorriendo sus montañas a ultima hora de la tarde, un camión se atravesó en la carretera no permitiendo que continuásemos camino. Por suerte fuimos advertidos que se trataba de una argucia de unos bandoleros para dejar caer la noche y atracarnos; de inmediato dimos la vuelta y nos alejamos de allí€ aunque con el miedo en el cuerpo
