Casa Aurora
- Dirección; Rúa dos Barcos, 10 (Sanxenxo).
- Horario: de 12.30 a 16.00 y de 20.30 a 24.00.
- Teléfono: 630 76 7981. Cierra lunes noche y martes.
Puede que Sanxenxo necesitase un lugar así, mucho más allá de la estacionalidad estival y eso es lo que ha pensado Miguel Anxo Besada tras la reciente apertura de Casa Aurora junto a su hermana Carmen. Rica cocina tradicional con productos siempre de la zona, una carta dinámica que va con el mercado, una clara apuesta por el vino autóctono -en conjunción con el producto- y un trato cordial son las bazas de este local que al poco de inaugurarse ya recibía un galardón: el concedido a Miguel Anxo por el Instituto Galego do Viño (Ingavi), que reconocía así su labor en pro de los vinos gallegos con uno de los Premios Magnum.
Miguel es uno de los grandes embajadores de los caldos autóctonos, como lo viene demostrando desde hace años en A Curva, en Portonovo, donde los néctares enxebres tienen un protagonismo especial entre las más de cuatrocientas referencias con las que cuenta y que sabe sugerir con cada plato. Casa Aurora, el nuevo local en Sanxenxo -que lleva el nombre en honor al antiguo negocio familiar, cuyo mural decora el interior de una de las paredes- también nace volcado con el vino y el producto y el objetivo de transmitir las sensaciones que producen a través de cada uno de los platos.
Así, con alma de la tierra, que es lo mismo que decir la mejor gastronomía y la inquietud de querer ser cada día mejores, en unos pocos meses -desde su apertura en abril- Casa Aurora se está convirtiendo en una referencia del buen comer gallego. Se trata de una oferta culinaria de mercado en la que puede aparecer, según el momento, sargos, rapantes, lubinas, diversos mariscos y otros pescados -siempre de la zona- o, cuando llegue la época cinegética, platos de caza mayor como jabalí o venado, además de cocido y potajes morosos haciéndose lentamente en los fogones cuando se acerquen los fríos.
Miguel Anxo y Carmen, herederos de una tradición culinaria de varias generaciones // G. Santos
"Procuramos hacer las cosas bien y si puede ser muy bien, mejor", dicen Miguel Anxo y Carmen, herederos de una tradición culinaria de varias generaciones atrás. Por eso el apartado de postres caseros se nutre de elaboraciones con raíz en la que aparecen cañitas rellenas, tarta de requesón, el flan de café o las filloas preparadas en la filloeira de toda la vida.
En el capítulo de vinos, el nombre de la casa, Aurora -la diosa del amanecer en la mitología romana-, además de un homenaje a la abuela parece augurar todo el potencial que encierran los caldos gallegos. Experto en néctares de la tierra y en saber conjugarlos y recomendarlos a la perfección con la materia prima autóctona, dice Miguel que Galicia es toda una potencia en vinos que hay que saber apreciar. Y habla de maridajes como unos berberechos con un espadeiro o un caiño o de un pulpo también con caíño. Pocas cosas hay mejores.
