Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

A ESCOLA DO FAROTolerancia cero contra el acoso

El colegio Miralba-Jesuitinas de Vigo implanta este curso el proyecto KiVa

Alumnos durante la formación para detectar acoso y ser observadores.

El colegio Miralba-Jesuitinas de Vigo se declaró este curso centro de "Tolerancia cero ante el acoso" con la implantación del Proyecto KiVa. Con esta iniciativa, los alumnos del colegio están comprendiendo cuándo se da una situación de acoso, trabajan los diferentes roles dentro de una situación en la que una persona es acosada, leen textos y hacen juegos en los que deben comprender los sentimientos y emociones. Pero sobre todo se trabaja sobre la figura de las personas que son observadores, para que sepan cómo pueden ayudar ante un hecho como este.

Para llevar a cabo este proyecto, todo el profesorado de Primaria, Secundaria y Bachillerato realizaron una formación en el mes de agosto, antes de comenzar el curso, en la que descubrieron los fundamentos de este programa desarrollado e implantado con éxito en Finlandia y que ya se está aplicando en 18 países más.

A través de una metodología activa, que es la que utiliza el propio programa, el profesorado se pudo adentrar en la dinámica de KiVa, que se basa en la prevención, la intervención y el seguimiento, así como descubrir los materiales de apoyo.

Valoraciones

Tras siete meses con el proyecto implantado, los implicados muestran su parecer. Los tutores de Educación Primaria comentan que "en esta etapa se empieza trabajando las emociones y los valores. Los niños ven cómo reconocerlas en el prójimo, para así ser consciente de si eso que yo estoy haciendo directamente, o de lo que soy partícipe indirectamente, está bien o mal. La acogida por parte de los alumnos está siendo buena. Las actividades propuestas son visualmente atractivas para los niños (contamos con vídeos, juegos online, carteles o fotografías, entre otros recursos) lo que nos facilita nuestra labor".

Inés Rodrígues (4º EP) resalta que "ayuda a la gente a saber qué es eso del acoso y, si te lo hacen, decírselo a los padres." Anabela Alfonso (5º EP) destaca que "me gusta porque así aprendemos cómo actuar ante un problema con los compañeros. Aprendemos que podemos tomar nuestras decisiones y valorar si haces bien las cosas o no. Sabemos cosas de las que antes no éramos conscientes, como situaciones, realidades de compañeros..." Para Antonio Rodríguez (5º EP), "ayuda a la convivencia en el cole porque nos damos cuenta de que algunas que hacemos a otros les molesta y así entendemos lo que puede sentir otro y a poneros en su lugar." Por su parte, Adriana Robleda (6º EP) dice que "yo lo veo bastante necesario porque la gente no se da cuenta del daño que le puede hacer a otras personas". Pedro Manuel Blanco (6º EP) señala que "en el caso de que haya un caso de acosos me enteré de que hay cuatro profesores para tratarlo. Con esto estamos más tranquilos."

Ya en Secundaria y Bachillerato el trabajo y las dinámicas se centran en reconocer una situación de acosos, cuáles son los roles que se dan en estas situaciones y en trabajar la figura de "los observadores" para que puedan ayudar en el caso de que se dé una situación de acoso. Las actividades a estos niveles ya trabajan con las opiniones del alumnado, los debates en el aula, noticias de prensa, vídeos y actividades lúdicas que les hacen comprender qué es el acoso.

Claudia Corredera (4º ESO) opina que "KiVa es una manera muy efectiva de enseñar a todos sobre una realidad, porque cuando en las noticias nombran casos de acoso todos decimos "oh, pobre" pero realmente no sabemos la gravedad que tiene".Sergio Gándara (3º ESO) destaca que "KiVa propone hablar abiertamente del acoso, sin pormenorizar ni volverlo un tabú, algo que es sumamente importante. Opino que la misma estructura de trabajo se aplique a otros ámbitos y problemas. Lo que más me gusta es poder hablar con mis compañeros sobre este tema y comprender el modus operandi del acosador y la situación de la víctima mediante las actividades que se hacen en clase".

Finalmente, Irene Veira (2º ESO) resalta que "en KiVa se enseña que ser diferente es bueno y todos lo somos, que no hay que hacer sentir mal a nadie y si tenemos la oportunidad de ayudar que lo hagamos y apoyemos al acosado. No hay que hacer sentir mal al acosador sino enseñarle que lo que hace es algo malo y que debe parar".

Compartir el artículo

stats