El Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas de la Guardia Civil, junto con la Unidad de Drogas y Crimen Organizado de la Policía Nacional, ha desarticulado una banda criminal dedicada al tráfico de estupefacientes en el marco de la 'Operación Croma-Roble', que se ha saldado con cuatro detenidos en A Coruña cuando se disponían a realizar una entrega de hachís.

Según ha informado la Comandancia coruñesa, los hechos sucedieron en un garaje situado en la Avenida de Oza de A Coruña, donde ambos cuerpos policiales se pudieron incautar de 50 kilos de hachís "de alta pureza", 102.000 euros en efectivo y dos vehículos.

En este operativo conjunto han sido detenidos cuatro individuos: J.I.M.M., de 34 años; A.C.G., de 29 años; I.G.V., de 28 años, y M.L.B., de 37 años.. El último fue arrestado cuando llevaba a cabo la entrega de partida de droga incautada con destino a los anteriores.

Los detenidos, junto con los efectos aprehendidos, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 8 de A Coruña, que ha acordado el ingreso en prisión incondicional de dos de ellos y la obligación de comparecer de los demás.

Trabajo continuo

Según destaca la Guardia Civil, "como consecuencia de un trabajo continuo", durante los últimos meses se han realizado diversas operaciones policiales, algunas de ellas conjuntas, "en las que fueron incautadas importantes cantidades de droga destinas a abastecer a traficantes locales de la provincia", matiza.

Así, en el marco de la 'Operación Escipión-Bucle' recientemente se desarticuló una "importante organización", recuerdan las mismas fuentes, dedicada al transporte y distribución de "importantes partidas de hachís", en la que se incautaron de más de cien kilogramos de este tipo de estupefaciente.

Más recientemente, la Guardia Civil desarrolló la denominada 'Operación Mozac', en la que fueron intervenidos 33 kilogramos de hachís en un vehículo con destino A Coruña.

Junto a las investigaciones que ambos cuerpos policiales desarrollan contra el tráfico de droga a gran escala, "se viene detectando un importante flujo de hachís con destino al mercado ilícito medio y minorista de hachís, dado que esta sustancia por su menor precio y demanda ocupa un importante sector dentro del consumo de drogas, especialmente en los ambientes juveniles y escolares, uno de los más sensibles y propicios al inicio en este tipo de adicciones", advierte el Instituto Armado.

En este sentido, explica la Benemérita que las organizaciones de narcotraficantes utilizan para el transporte y distribución del estupefaciente vehículos acondicionados con las denominadas "caletas", en los cuales "se suelen realizan los transportes de manera continuada y periódica, a fin de reducir el riesgo a las intervenciones policiales".