La Consellería de Medio Ambiente ha encargado otro informe sobre la situación de los acantilados de la playa de As Catedrais, que será complementario al último existente, de septiembre de 2017, que confirmó la "inestabilidad" de estas formaciones geológicas y determinó que se incluyese una advertencia por escrito a los visitantes sobre los riesgos. Mientras, el arenal reabrió a los visitantes ayer tras permanecer cerrada desde el sábado, cuando ocurrió el desprendimiento de una roca que costó la vida a una joven turista. Técnicos y trabajadores del espacio informaron a las personas que acudieron de las precauciones que deben mantener en las zonas de riesgo y les recomendaron que no se adentrasen en las grutas.

La conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato, se refirió ayer al nuevo informe encargado y trasladó sus condolencias a los allegados de la joven fallecida. Calificó el hecho de "auténtica tragedia" y añadió que "nada ni nadie lo hubiese podido evitar". Sobre el informe de evaluación del pasado septiembre, el documento determinó que la situación de los acantilados de As Catedrais es similar al del resto de formaciones de la cornisa cantábrica, que son en sí mismos "inestables". "En ese informe se concluye que tiene que haber una advertencia de esa inestabilidad a los visitantes de las playas o de los acantilados, una advertencia que ya existe", indicó la conselleira.