Los padres del niño Gabriel Cruz de ocho años, Ángel Cruz y Patricia Ramírez, han señalado este jueves que "hoy sin duda es uno de los días más duros a los que nos vamos a enfrentar" después de que fueran citados este jueves por el juez Rafael Soriano para que comparezcan en calidad de testigos en el marco de las diligencias previas abiertas para esclarecer la muerte violenta del pequeño a manos presuntamente de la pareja sentimental del padre, Ana Julia Quezada.

Así lo han indicado en un mensaje trasladado a través del portavoz familiar a los medios de comunicación, en el que han remitido además un collage fotográfico que realizaron con el pequeño en la pasada Navidad para felicitar las fiestas, con el que esperan que "en el día de hoy" pueda "aliviar el dolor tanto como a nosotros".

"Si pensamos en Gabriel, creo que él nos sonreiría y nos diría que hay que estar contentos", han señalado los padres del pequeño durante esta mañana momentos antes comparecer ante el Juzgado de Instrucción 5 de Almería como testigos ya que, al encontrarse aún las actuaciones bajo secreto, no se ha producido personación como acusación particular, según han confirmado a Europa Press fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

Cabe recordar que el juez imputa a la investigada la presunta comisión de, además de un delito de asesinato y otro de detención ilegal, un delito contra la integridad moral. A la declaración de este jueves han acudido también el letrado Esteban Hernández, que representa a Ana Julia Quezada. Las declaraciones se prolongarán hasta este viernes, ya que el instructor ha citado también en calidad de testigo a la abuela del menor.

El juez ha acordado además investigar si Ana Julia Quezada suministró drogas al pequeño después de llevárselo el 27 de febrero cuando salió de la casa de su abuela en Las Hortichuelas, en Níjar (Almería), ya que la Guardia Civil halló ansiolíticos durante el registro del vehículo en el que encontraron el cuerpo sin vida del pequeño 13 días después en Vícar.

En concreto, ha pedido que se averigüe si hay trazas de esta sustancia en el cadáver de Gabriel para determinar si fue drogado o, por el contrario, los fármacos encontrados eran "para consumo propio" de Quezada.

Será la ampliación del informe preliminar de autopsia el que determine este extremo una vez que el Instituto Nacional de Toxicología de Sevilla remita al juzgado el resultado de los análisis de las muestras biológicas remitidas desde el IML de Almería. Cabe recordar que los forenses concluyeron que el niño falleció por "asfixia mecánica" el mismo día en el que se perdió su rastro.