Las autoridades chinas han detenido a un hombre después de que arrojase a su hija recién nacida en un contenedor de basura en una población de China. El padre envolvió al bebé en una bolsa antes depositarla en el colector dos horas después del nacimiento.

El hombre alegó que después de que su novia diese a luz vieron como la niña se ponía morada y pensaron que parecía una enfermedad "incurable", por lo que decidió deshacerse de ella. Una anciana se percató más tarde de que el bebé, que todavía tenía el cordón umbilical, estaba abandonado dentro del contenedor y lo llevó al Xuanwei People’s Hospital.

El padre fue cazado por las cámaras de la ciudad, que grabaron unas imágenes que luego serían transmitidas por la televisión china en las que se ve como deposita a la recién nacida en el contenedor. La intervención de la anciana que salvó al bebé también han sido difundidas. El padre fue arrestado y detenido por violar la ley penal de China y la madre liberada bajo fianza.