Ya suma seis condenas. Y ahora podría sumar la séptima. Un conductor que protagonizó una temeraria huida por el centro de Vigo y la autopista AP-9, donde llegó a romper las barreras del peaje en Redondela, afronta 5 años y medio de cárcel y 8 de retirada del carné, junto a una multa de 10.800 euros. El fiscal atribuye a D.V.L. un delito de conducción temeraria -que absorbe el de conducción alcohólica- y otro de atentado. Señalado para ayer en el Juzgado de lo Penal número 2 de la urbe olívica, el juicio finalmente se aplazó al no poder acudir el acusado por una lumbalgia.

Sucedió a última hora de la tarde del 28 de octubre de 2016. El joven, que estaba en una bolera de la calle Areal de Vigo, fue requerido por la Policía Local para que retirara el coche que usaba -propiedad de su padre- al estar mal aparcado e impedir la entrada a un garaje. Pero dado sus "notables síntomas de embriaguez", los agentes le impidieron coger el vehículo, advirtiéndole de que se lo llevaría la grúa salvo que otra persona se hiciese cargo.

De forma sorpresiva

El joven fue a buscar al local a una chica y, mientras los policías le tomaban los datos para que pudiese coger el coche, el acusado, de forma sorpresiva, se metió en el vehículo y, tras cerrar los seguros, huyó. Iniciaba así una peligrosa fuga en la que fue perseguido por agentes en moto a los que se unieron otros efectivos. El fiscal cuenta que el hombre condujo a gran velocidad y se saltó cinco semáforos en rojo hasta que entró en la autopista, abandonando esa vía en la salida de Redondela, golpeando las barreras del peaje. Tras tomar una rotonda en sentido contrario, volvió a entrar en la AP-9. En su fuga alcanzó velocidades de hasta 160 km/h.

El automovilista, se señala, puso "en concreto y grave peligro la vida o integridad corporal" de los policías y de otros conductores. Numerosos vehículos tuvieron que hacer maniobras evasivas o detenerse para evitar impactar con él. En la autopista circuló en zigzag y por el arcén. E incluso llegó a frenar con la intención, fallida, de que la moto de un agente impactase contra su coche.