Una probable imprudencia al volante vuelve a incrementar el saldo de vidas humanas que se cobra la carretera. Una persona falleció ayer y otras tres resultaron heridas leves al colisionar un turismo contra un árbol en una carretera secundaria de la localidad pontevedresa de Caldas de Reis. El accidente de circulación ocurrió ayer minutos antes de las cuatro de la madrugada. El conductor del vehículo, un BMW, de 25 años de edad y vecino del municipio de Cuntis, dio positivo en la prueba de alcoholemia y también arrojó un resultado indiciario positivo en la prueba de drogas. El fallecido es F. J.G. I., tenía 50 años y también era vecino de la localidad cuntiense.
Al parecer, tanto la víctima mortal como los otros ocupantes del vehículo, eran todos conocidos; amigos que solían andar juntos y ayer ocupaban el BMW pilotado por el conductor de 25 años por la carretera PO-220, que enlaza la Nacional 550 en el norte de Caldas con Cuntis.
El vehículo procedía de Cuntis y a la altura del kilómetro 1.150 se salió de la vía por el margen izquierdo e impactó contra un árbol. En el asiento trasero derecho viajaba la víctima mortal, que hacía uso del cinturón de seguridad. Los otros tres heridos, entre ellos el conductor que también llevaba el cinturón puesto, presentaban lesiones de carácter leve. El vehículo, a consecuencia del impacto registrado, también sufrió daños de consideración.
Hipótesis
En cuanto a las causas que se barajan en relación con este siniestro, la Guardia Civil trabaja con la hipótesis de una posible velocidad inadecuada para el trazado de la vía. Además, a la hora de hacer la prueba de la alcoholemia al piloto del turismo este arrojó un resultado positivo de 0,59 y 0,58 mg/l concretamente, lo que significa el doble de la tasa permitida por ley y justo por debajo del límite de los 0,60 que separa la infracción administrativa de la penal en lo que se refiere a la conducción etílica. El conductor también dio positivo de forma indiciaria en cocaína y cannabis.
Ante las circunstancias que rodean al accidente, la Guardia Civil de Tráfico trabaja ahora en la elaboración del atestado para determinar las posibles responsabilidades del conductor del vehículo, aunque fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil consultadas ayer confirmaron que, en principio, el piloto del vehículo está siendo investigado (no detenido) por un posible delito de homicidio imprudente.
