Caso Abierto - Faro de Vigo

Caso Abierto - Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Nuevo golpe policial a la venta de heroína

El fiscal pide 30 años para el clan de la Ferrería de Vigo, que vuelve a juicio cuatro años después

Argentina M.G. y su marido afrontan seis años de prisión como "cabecillas" del negocio

Argentina y su marido, en el centro, en el juicio de 2013 donde aceptaron 3 años de prisión. // J. de Arcos

Penas que suman 30 años de prisión. Esta es la condena que solicita la Fiscalía para seis procesados del clan de la Ferrería de Vigo por la venta de heroína en dos pisos que controlaban en la zona. El grupo liderado por Argentina M.G. y su marido Luis G.S. vuelve el martes al banquillo de los acusados de la Sección Quinta de la Audiencia con sede en Vigo, cuatro años después de que aceptaran 3 años de prisión cada uno por el mismo delito en una vista de conformidad. Entonces fueron juzgados, entre otros, con dos de sus hijos que se conformaron con año y medio de cárcel y multas.

En esta ocasión el matrimonio estará acompañado por otras cuatro personas, entre ella una mujer identificada como E.G.S., en cuyo domicilio los agentes de la unidad contra la Droga de la comisaría viguesa encontraron tres pistolas y un revólver, así como numerosas munición, tanto cartuchos y balas blindados como cartuchos detonadores.

La Fiscalía solicita para el matrimonio seis años de prisión por un delito contra la salud pública en su modalidad de sustancias que causan grave daño contra la salud, con la agravante de reincidencia y multa de 1.518 euros. Para el resto de los acusados el Ministerio Público solicita 5 años de cárcel y 1.518 euros de multa para cada uno, que en el caso de la mujer en cuyo domicilio se intervinieron las pistolas se eleva a dos años más por tenencia ilegal de armas.

La nueva investigación contra el considerado mayor grupo de venta de drogas al menudeo en el Casco Vello de Vigo se desarrolló en los mese de mayo y junio del años pasado. Agentes de la Udev controlaron los dos domicilios donde se vendía droga e identificaron a los compradores, que llegaban pagaban y salían con una bolsita de droga, la mayoría heroína, si bien también se intervinieron cocaína y hachís.

Los acusados, según el fiscal, formaban parte de un grupo organizado que tenía por objeto la comisión de delitos contra la salud pública con un reparto de tareas en la zona de la Ferrería. Así, expone que Argentina realizaba ventas y controlaba la actividad con visitas diarias a los dos domicilios; su marido realizaba vigilancias, mientras que L.G.M. y M.G.S. pernoctaban en el segundo domicilio y mantenían "vivo" dicho punto de venta. E.G.S. realizaba funciones de transporte, venta directa y control, y D.D.B. era el encargado de las ventas nocturnas y directas a compradores.

Compartir el artículo

stats