Cuatro establecimientos hosteleros y un domicilio del casco histórico de Baiona fueron atacados la madrugada de ayer por un supuesto incendiario. La Guardia Civil y la Policía Local buscan al autor de los fuegos que, según las primeras pesquisas, es joven, actuó en solitario y encapuchado y usó algún tipo de combustible para propagar las llamas. Uno de los conatos obligó a desalojar un edificio de viviendas en la céntrica calle Conde, para evitar intoxicaciones por inhalación a causa del humo: allí el vándalo plantó dentro de un portal. Los fuegos se saldaron con daños materiales leves que no afectaron al interior de los locales, que en ese momento estaban cerrados al público.

Los daños más aparatosos fueron en la calle Conde en su confluencia con calle A Guarda. Allí está la brasería Lume. El incendiario no atacó directamente el establecimiento, sino el portal que hay al lado, donde los responsables del bar guardan en el interior el mobiliario de la terraza, sombrillas y otros objetos. El autor aprovechó que la puerta no estaba cerrada con llave para prender fuego dentro, quemando esos efectos. También había bombonas. "Suerte que no ardieron, sino las consecuencias podrían ser muy graves", afirma uno de los socios del local, a su vez residente del inmueble cuyo portal resultó afectado.

También en la calle Conde el atacante quemó parte del toldo de la cervecería Estrella Baiona. Y en Ventura Misa volvió a hacer lo mismo en otro local, La Paleta del Pintor. Actuó también en el Vagalume, en la calle Lorenzo de la Carrera, donde plantó fuego a una sombrilla. Allí un testigo lo vio y, al verse descubierto, huyó. "Actuaba solo; era un chaval y llevaba una capucha negra", relatan.

Durante su ruta por la calle Conde, el autor se paró ante una vivienda, la del portavoz municipal del PSOE, Rafael Lores. Según explicaba ayer, la familia dejó la ventana del bajo entreabierta para ventilar, ante el olor a quemado desde los graves incendios forestales de hace una semana. Todo apunta a que el incendiario metió la mano con un mechero y prendió fuego a la cortina y la combustión quemó parte de la tela y reventó el cristal. La familia dormía en el piso superior y no se percató hasta las dos de la tarde de ayer, cuando vieron los daños desde el exterior. "Cheiraba a queimado, pero non lle dimos importancia porque é un cheiro que permanece desde o domingo pasado. Tivemos sorte de que se apagase pronto. Se prendese teriamos problemas porque a ventá é a dun cuarto cheo de libros e papeis", señaló Lores.

Por estas acciones, fueron movilizados Guardia Civil y Policía Local. Al incidente al lado del Lume también acudió el GES Val Miñor.