Tres detenciones en un fin de semana que evidencian una grave situación de riesgo para la supuesta víctima quien, tras el tercer episodio de violencia de género, fue custodiada por la Policía Local y trasladada a un piso de acogida. Ocurrió en Vigo y el arrestado, que en las dos anteriores ocasiones quedó en libertad, comparecerá hoy en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de la urbe olívica, a donde ayer también fue trasladado ya que había previsto un juicio rápido. También estaba la víctima, asistida por una abogada y afectada por la situación vivida estos últimos días.

Con detenciones anteriores y una orden de alejamiento y de prohibición de comunicación en vigor, el primero de los últimos arrestos de Antonio F.A., de 49 años, fue la madrugada del jueves para el viernes. Era medianoche y la Policía Local, tras ser avisada, fue a un piso de calle Aragón -sospechaban que el hombre podría ir provisto con un arma blanca- y se toparon a la víctima muy asustada. El picaporte de la puerta del piso estaba arrancado junto con sus tornillos. En la cocina había restos de un plato roto y de comida. La mujer contó a los agentes que se vio sorprendida por su ex en el piso: ignoraba que él tuviese llaves. Según su relato, la agarró y zarandeó, amenazando con matarla, para posteriormente irse. Según fuentes policiales, la mujer no quiso ir a ningún centro médico. Los policías buscaron al varón por la zona sin éxito.

Pero dos horas después, el policía local responsable de la orden de protección de la mujer volvía a alertar solicitando la presencia de una patrulla. Al parecer, el hombre había vuelto a acceder al domicilio. La víctima contó que, tras la primera intervención policial, se refugió en casa de una vecina y, al regresar a su vivienda, vio el interior más revuelto. En una revisión exhaustiva del piso los efectivos hallaron al hombre escondido dentro del armario del dormitorio principal, tapado con una manta. Llevaba unas llaves de la casa y en el garaje del edificio estaba su turismo.

Tras ese arresto, compareció en el juzgado y quedó en libertad. Pero el sábado volvía a ser detenido, por quebrantar supuestamente de nuevo el alejamiento. Fue hallado oculto en la terraza del edificio. De nuevo libre tras pasar a disposición judicial -por uno de esos arrestos tenía el juicio rápido de ayer-, el domingo la mujer, según la Policía Local, sufrió por la mañana "un nuevo episodio de violencia" a la entrada de su vivienda. El hombre, que según fuentes próximas al caso reclama dinero a la víctima, huyó y fue detenido ya por la noche por la Policía Nacional.