A través de un furgoneta y custodiada por varias personas para garantizar su entrega y evitar ser detectados. Así pretendían distribuir los más de 60 kilos de heroína -la incautación más importante en lo que llevamos de año en España- la banda gallego-búlgara desarticulada la semana pasada por agentes de la Policía Nacional y la Agencia Tributaria tras sorprenderlos en pleno intercambio de la mercancía en una nave de Caldas.

La droga tenía como destino Portugal y resto del territorio nacional y este encargo corría a cargo de la red de narcos gallega. Los portadores del estupefaciente, cinco búlgaron y un portugués, intentaron el traslado de esta heroína desde América del Sur y Bulgaria. En este último caso, la droga fue trasladada desde el país balcánico a través de un tráiler que se resguardaba en la nave del polígono industrial de Caldas.

La organización pretendía trasladar la droga a otra furgoneta para llevarla después a una llugar más seguro, tal y como explicaron fuentes del caso.

Los once detenidos en este operativo ingresaron en prisión preventiva.