Cuatro aldeas del término municipal de Abrantes, en el distrito de Santárem (centro de Portugal), fueron evacuadas ayer ante el avance de un incendio que tratan de sofocar más de 650 efectivos.

Las cuatro poblaciones fueron evacuadas "por precaución" después de que el fuego, declarado el miércoles, aumentara en intensidad en las últimas horas, explicó la alcaldesa de Abrantes, Maria do Céu Albuquerque. "Evacuamos como medida de precaución ante el temor de que [los habitantes] no consiguieran salir más tarde porque el incendio está cerca y, si hubiese necesidad de cortar las carreteras, ellos no podrían escapar", dijo la regidora a la emisora TSF.

En las últimas horas de ayer se había reforzado el envío de equipos de emergencia a la zona, donde trataban de controlar las llamas 659 efectivos apoyados por 208 medios terrestres y ocho aéreos, según la Autoridad Nacional portuguesa de Protección Civil (ANPC).

Se trata del mayor de los diez incendios actualmente activos en Portugal, uno de los cuales obligó a cortar el tráfico de la autopista A1, que une las ciudades de Lisboa y Oporto, a su paso por el término municipal de Mealhada, en el distrito de Aveiro (centro del país).

La circulación se tuvo que interrumpir en el kilómetro 204 ante la densa columna de humo que dificultaba la visibilidad en la vía, a apenas un kilómetro de las llamas, por lo que los conductores tuvieron que ser desviados por rutas alternativas.

Según datos de la Autoridad Nacional portuguesa de Protección Civil (ANPC), 106 efectivos, veinticuatro medios terrestres y uno aéreo trataban de sofocar el incendio, que comenzó alrededor del mediodía local.