Un recluso gijonés de 22 años se fugó ayer del centro penitenciario de Asturias, donde cumplía 7 años y medio de cárcel por robo. Sólo le quedaban tres y estaba en segundo grado, según las fuentes consultadas. Al parecer, huyó por el portón del Centro de Inserción Social (CIS) por el que entran los carros de la comida.