Numerosos familiares, amigos y vecinos de Antonio Arca Brey, el empresario de Forcarei asesinado en Culiacán (México) el pasado día 12, acudieron ayer a su funeral en la iglesia parroquial de Quintillán, de donde era natural el fallecido. El templo se quedó pequeño para acoger a los asistentes, que quisieron darle su último adiós.
Encabezando la comitiva que acompañó el féretro a la entrada y a la salida de la iglesia -hacia el cementerio- estaban, entre otros familiares, los padres del fallecido y también su novia, que viajó desde México y llegó a Forcarei el pasado martes. Asimismo, también acudieron algunos de los socios del empresario. En el funeral, que contó con la participación de cuatro sacerdotes, también hubo representación del gobierno local.
Antonio Arca Brey fue asesinado tras ser presuntamente víctima de un atraco.
