Un vecino de Salvaterra, José Rodríguez Francisco, jubilado de 66 años, falleció ayer a primera hora de la tarde mientras se bañaba en una piscina de propiedad familiar en su casa de la parroquia de Soutolobre. Según los datos que han podido trascender, el hombre se encontraba dentro del agua cuando debió sentirse indispuesto y seguidamente perdió el conocimiento. La autopsia debe determinar si murió ahogado o si, por el contrario, falleció de un infarto de miocardio, como se especula, ya que, según los vecinos, padecía del corazón.

Según informó el 112 Galicia, los hechos ocurrieron alrededor de las 13.45 horas. Fue un particular el que alertó al centro de atención a las emergencias de Galicia a las 13.50 horas.

A partir de ahí fueron movilizados los servicios de Urgencias Médicas, Policía Local y Guardia Civil, que se trasladaron al lugar de los hechos.

Así, acudieron una ambulancia medicalizada con personal del centro de salud de Salvaterra. Los sanitarios intentaron reanimar a José, que se encontraba en situación de parada cardiorrespiratoria, pero nada pudieron hacer por salvarle la vida.

El fallecido fue trasladado por tanto al hospital Nicolas Peña de Vigo, donde le será practicada la autopsia a lo largo de la mañana de hoy. No se espera su llegada al Tanatorio de Salvaterra hasta las 18.00 horas y los funerales tendrán lugar mañana.

Toda la parroquia de Soutolobre, y especialmente los vecinos del barrio de Buenos Aires, donde residía el fallecido, estaba ayer por la tarde consternadapor el suceso.

La muerte de este vecino de Soutolobre se produce tres días después de que otro hombre, en este caso de 45 años y vecino de Mondariz, muriese en circunstancias similares, en este caso en Praia América, de Nigrán, pues resultó afectado por un infarto mientras se bañaba.

Félix Amable Blanco Sendín, de 45 años de edad, y muy conocido por su guerra contra la avispa asiática, sufrió una parada cardiorrespiratoria mientras se encontraba en el agua. Los socorristas del arenal, tras ser avisados por las personas que se encontraban en ese momento en la zona, contaron con la colaboración de los propios bañistas para arrastrar al varón hasta la orilla pero una vez fuera nada pudieron hacer por salvar su vida.

El servicio de emergencias de Galicia, que recibió la alerta gracias a la llamada de uno de los socorristas, movilizó en Praia América a una patrulla de la Guardia Civil desde su puesto de Baiona, al 061 y a la Policía Local y Protección Civil de Nigrán.

En el caso de Soutolobre, y al encontrarse José en una propiedad familiar, no tuvo una atención tan rápida, pero los medios de emergencia acudieron según su media de actuación.