La forma en la que David Oubel Renedo, acusado de asesinar a sus dos hijas en Moraña, planificó y ejecutó el terrible crimen "encaja en el perfil del criminal psicópata". Al menos así lo explicaron los peritos psiquiatras que examinaron hasta en cuatro ocasiones al parricida confeso.

Los dos peritos confirmaron que en dichos análisis no hallaron ningún tipo de patología o trastorno psiquiátrico en el acusado que pudiera afectar a su estado mental en el momento de los hechos. Otros dos profesionales del instituto de medicina legal de la Comunidad de Castilla y León también descartaron cualquier "alteración de las bases de la imputabilidad". Es decir, que no hallaron ningún tipo de alteración mental que "le impida comprender lo que va a hacer".

Los primeros peritos insistieron en destacar los rasgos de personalidad "narcisistas" y "psicopáticos" del procesado pero sin llegar en ningún caso a suponer un trastorno.