La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha acordado revocar la suspensión de la condena de prisión que se había concedido a José Luis Luna Pereira, el presunto asesino del joven de Chapela (Redondela), en relación con un caso de tráfico de drogas por el que fue sentenciado en diciembre de 2014.

La sala había dejado en enero de 2016 sin efecto su ingreso en la cárcel condicionado, además de a no delinquir durante tres años, a que no abandonase el tratamiento de desintoxicación que seguía. Pero los análisis forenses que le hacen cada seis meses evidenciaron consumo de heroína y cocaína. Ante el tercer examen en que se vio esta circunstancia, y al estimarse que ese consumo no es puntual sino reiterado, la sala, tras pedirlo el fiscal, decidió en un auto notificado ayer revocar la libertad condicional: deberá cumplir los 2 años de cárcel impuestos en su día, de los que se descontarán los 10 meses que estuvo en prisión preventiva por este caso. "Se comprobó que no seguía el tratamiento", dicen las fuentes consultadas.

En todo caso, Luna ya está desde este 26 de junio en prisión provisional por disparar y matar la madrugada de San Juan a un joven en la playa de Arealonga de Chapela tras recriminarle este chico que orinase en una zona donde había gente. Las fuentes inciden en que el auto que se acaba de dictar por el caso de narcotráfico es ajeno al crimen: de hecho, la revisión de la ejecutoria para estudiar la revocación, como adelantó FARO, se acordó en una providencia dictada un día antes del asesinato. Es relativamente frecuente que se revoque la libertad a condenados por drogas al comprobarse que no cumplen el tratamiento de desintoxicación.