El Juzgado Penal 3 de Vigo tenía en su agenda ayer un juicio a un vecino de Vigo que intentó clavar un destornillador a varios policías nacionales. A un agente, al que intimidó seis veces, logró herirlo con este arma en el costado derecho pese a que el efectivo llevaba un chaleco protector (antibalas). Ocurrió en agosto de 2016, al ir allí los policías por una alerta de forcejeo entre el acusado y su esposa. La Fiscalía pedía aplicar al imputado la eximente incompleta de alteración psíquica. El caso se resolvió con una conformidad.