"Llevamos tres días en paz; ahora hay tranquilidad en el barrio". La frase la repiten varios residentes de la carretera do Vao, en Coruxo (Vigo). Se refieren a un vecino con gran historial delictivo -sobre todo robos- que desde el domingo está en la cárcel. El titular del Juzgado de Instrucción 4 de Vigo, Juan Carlos Carballal, decreto prisión provisional para este hombre, C.O.C., de 34 años, por un grave episodio ocurrido el sábado, cuando supuestamente agarró del brazo y tiró de una niña de 4 años que estaba en la parada del autobús con su abuela y un primo también menor. La mujer forcejeó con él, logró que soltase a su nieta y corrió a pedir auxilio: varias personas salieron de un bar próximo y retuvieron al hombre hasta que llegó la Policía Nacional, que lo detuvo. Antes de eso, presuntamente también amenazó a la madre de la niña, que trabaja en un súper cercano y fue allí al ser alertada: "Ten cuidado, voy a matar a tu hija y voy a ir a por tí". El juez atribuye inicialmente al hombre un delito de tentativa de detención ilegal y otro de amenazas graves.

Los sucesivos robos y "follones" de este vigués ya hartaron hace mucho a numerosos vecinos del barrio. Su historial delictivo es extenso. Es el mismo que en abril causó un accidente en Nigrán con un coche robado en el que tres menores resultaron heridas. "Siempre lo ves por ahí bebiendo o colocado, ese es su problema; asusta a la gente; estábamos deseando que fuese ya para dentro", no dudan en comentar en la zona.

Un episodio ocurrido este sábado por la tarde lo ha llevado a prisión. Según testigos, C.O.C. llegó a la parada del bus y "tiró" una chaqueta que había dejado apoyada en el banco una abuela que estaba allí con sus dos nietos pequeños. Otra mujer le llamó la atención pero él "arrojó al suelo" un cartón de vino que llevaba y agarró presuntamente del brazo a la niña, tirando de ella con fuerza. La abuela reaccionó enseguida, pero tuvo que forcejear con él para que la soltara. Cuando lo logró, corrió con la menor y su otro nieto a pedir auxilio. "Los chicos del bar la escucharon, fueron a por él y lo retuvieron", cuentan en el barrio. El juzgado tiene el parte de lesiones de la pequeña, que fue asistida en un centro sanitario al presentar hematomas en el brazo. La abuela y la madre de la niña fueron atendidas por un ataque de ansiedad. Ambas declararon el lunes en sede judicial.

El magistrado -que decretó prisión provisional para el detenido tras solicitarlo la Fiscalía- ha requerido ahora a la Policía Nacional para que identifique a los testigos de lo ocurrido el sábado y para que esclarezcan si hace un mes protagonizó otro episodio similar -tal y como refiere un testigo según el atestado policial-. El juez también quiere saber si este delincuente tiene una especial fijación u obcecación con la madre de la niña o en general con las empleadas que trabajan con ella en el súper próximo al lugar de los hechos. Y es que según cuentan vecinos de la zona, este hombre suele ir a diario al establecimiento a comprar "cerveza o vino". "Va con amenazas, se pone violento si no es el primero en ser atendido...; un día incluso llevaba un martillo", concretan.