La Policía Local de Gondomar sorprendió el viernes en la PO-340 a un conductor que tenía el carné retirado por vía judicial y que arrojó una tasa positiva en el control de alcoholemia: concretamente, de 0,88 y de 1,03, cuadruplicando así lo máximo permitido. Esta semana será sometido a un juicio rápido en Vigo.