La Policía Nacional trata de esclarecer si el siniestro juego de la Ballena Azul ha llegado a la Región de Murcia. Investigadores de este Cuerpo trabajan en determinar qué motivó a dos menores de 12 años de Molina de Segura a intentar quitarse la vida.

Del caso se han hecho cargo agentes de la Policía Judicial y del Grupo de Menores (GRUME) de la Policía Nacional de Murcia. La investigación está en marcha y por ello, según una portavoz del Cuerpo, no se facilitan datos oficiales. Las menores implicadas no serían ni siquiera adolescentes: serían niñas de corta edad. Otras fuentes aseguran que no siguieran han cumplido los 12 años: que una tiene 11 y la otra 10.

Desde la Policía apuntaron que los agentes han requisado abundante material informático, tanto de los teléfonos de las menores como de los ordenadores que habitualmente utilizaban éstas. Ahora se está analizando este material, con el fin de ver si hay indicios de por qué estas niñas llegaron a pensar en suicidarse.

Los investigadores no descartan que las causas tras estos intentos de suicidio estén en el entorno familiar de las pequeñas y no en la Red. De ahí que también se esté hablando con sus allegados.

Fuentes cercanas manifestaron que las pequeñas pertenecen a familias desestructuradas. De ahí que la hipótesis de los intentos de suicidio, más allá de la posibilidad de la Ballena Azul, se encuentre en circunstancias del entorno de las pequeñas. También se investiga si las niñas hicieron un pacto para quitarse la vida. Además de la Policía, los Servicios Sociales de la Comunidad se han implicado en el caso.

Desde la Consejería de Educación, por su parte, indicaron que ningún centro escolar de la Región ha dado parte de haber detectado un caso de la Ballena Azul en sus aulas.

Según la Consejería, que actualmente dirige Adela Martínez-Cachá, "el protocolo que se desarrolla en los casos de autolesión del alumno es el siguiente: una vez que se detecta, se pone en conocimiento de la familia y del Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica Específico de Convivencia, que interviene de forma individualizada con los padres, el alumnos, docentes y compañeros" de las afectadas.

La Ballena Azul, presente en redes como Facebook o Twitter consiste en una serie de ´retos´ planteados en grupos cerrados en los que se pide a los participantes, menores en su mayoría, que realicen una prueba cada día durante cincuenta jornadas. El reto final es quitarse la vida.

Fuentes cercanas apuntaron que las niñas presentaban cortes en los brazos, aunque eran de carácter supérfluo. Las menores, al parecer, iban comentando a sus compañeros de clase sus intenciones de quitarse la vida. También aseguraban que lo habían intentado en más de una ocasión. Fue un docente del centro en el que estudian el que dio la voz de alarma a la Policía.

Cuando se preguntó a las niñas si su actitud tenía que ver con el juego de la Ballena Azul, ambas admitieron que conocían esta macabra moda. Sin embargo, los investigadores insisten en que los problemas que las pequeñas tenían con su entorno son la causa que las animó a tener esta actitud. Algunos de los profesionales que han estado con ellas no descartan que se trate de una llamada de atención.

Al conocer los comentarios y ver las heridas de las niñas, los profesores decidieron dar la voz de alarma. Las últimas noticias sobre el juego de la Ballena Azul, cuya última prueba es el suicidio, tiene preocupados a docentes y padres.