El conductor acusado de matar a un anciano ha declarado este miércoles ante el juez que únicamente le empujó después de que el hombre le amenazara con darle con su bastón en el transcurso de una discusión de tráfico por ír conduciendo demasiado rápido, algo que ha reconocido, han informado a Europa Press fuentes jurídicas.

Así lo ha manifestado durante su declaración ante el juez de Instrucción número 3 de Valdemoro tras pasar a disposición judicial esta mañana. En la comparecencia, el fiscal ha solicitado su ingreso en prisión por un delito de homicidio, han informado fuentes fiscales.

En su declaración, el hombre ha admitido que iba conduciendo "un poco deprisa" y ha negado que le pegara un puñetazo, sino que solamente le empujó. Y lo hizo después de que el anciano le amenazara con pegarle con su bastón. Además, se ha negado a dar el nombre de la mujer que le acompañaba, alegando que era una prostituta.

El incidente se produjo cuando el fallecido se disponía a cruzar un paso de peatones. Ante la velocidad del agresor, éste golpeó el coche del acusado con su bastón, lo que provocó que saliera del coche y le empujara. Tras ello, la víctima se cayó y se golpeó contra el suelo.

Al parecer, el golpe que niega haber dado produjo que el anciano se quedara inconsciente y se golpeara contra el suelo, lo que provocó su muerte, según han precisado las mismas fuentes."Mi padre se debería haber muerto de viejo, no así"

El hijo de la víctima, Ramón, ha mostrado este miércoles su "rabia" por lo ocurrido porque opina que su padre "se debería haber muerto de viejo, no así".

En declaraciones a la cadena Cope recogidas por Europa Press, ha relatado que tanto él como sus dos hermanos están "en shock, y aún no se creen lo que ha sucedido". "Esto ha sido un palo", ha dicho. Además, ha contado que su padre era un luchador, inmigrante y trabajador de la empresa Pegaso.

Ramón ha manifestado que en estos momentos "está tan desorientado que no sabe lo que espera de la Justicia" y se pregunta si el presunto autor de los hechos, con 18 años, actúa de esa manera contra un anciano de 81 "qué será capaz de hacer".

El hijo del fallecido ha agradecido a la Fuerzas de Seguridad y al Samur la rapidez en su actuación y los esfuerzos que hicieron para reanimar a su padre, "pero no fue posible". Afirma que su madre, enferma de alzheimer, "cuando tiene momentos de lucidez, que son pocos, pregunta por su padre y no saben que hacer ni que decirle".