El cadáver de una mujer de 39 años cuya desaparición fue denunciada hace dos semanas por su familia fue hallado en el interior de una maleta en el cauce seco de un río en Sevilla. Su pareja desde hace más de diez años fue detenido por la Guardia Civil tras confesar el crimen e intentar suicidarse. El varón afirmó, en un principio, que su mujer se había marchado voluntariamente e incluso llegó a celebrar la comunión de su hija. Tras los registros en su casa y verse acorralado, el varón intentó suicidarse para luego confesar.