La Audiencia de Vigo ha señalado para la próxima semana el juicio contra el conductor de una furgoneta y los tres chicos que lo acompañaban que, en 2015, arrolló mortalmente a una septuagenaria en la parroquia viguesa de Candeán y se dio a la fuga.

El asunto se tramitó por el procedimiento del jurado popular, pero, salvo sorpresas, ya no será preciso celebrar la vista oral. El motivo es que el de este arrollamiento fue el primer caso que se derivó a mediación penal en los juzgados de Vigo. La pionera experiencia concluyó con un acuerdo en el que los procesados accedieron a reparar a la familia de la fallecida. Esto facilitará que la causa se resuelva con un acuerdo de conformidad: lo habitual tras prosperar las mediaciones es que se beneficie a los imputados con la atenuante de reparación del daño, lo que supondría una rebaja de las condenas que inicialmente se solicitaban.

La Fiscalía, en el escrito de acusación realizado con anterioridad a la mediación pedía para el conductor 8 años de cárcel y 6 de retirada del carné por delitos de homicidio por imprudencia grave y omisión del deber del socorro. Para los jóvenes que lo acompañaban solicitaba más de 4.000 euros de multa. La víctima, de 77 años, fue arrollada cuando iba a cruzar la calle para tirar la basura. La furgoneta iba a gran velocidad. Cuando el conductor fue localizado horas después dio 0,10 en la alcoholemia y positivo en cannabis.