Los últimos testimonios la sitúan en la zona de la estación de autobuses el viernes 7 de abril, en estado de "enajenación". Ninguna información ni rastro nuevo han aparecido para dar con el paradero de la ourensana María Belén Rodríguez Estévez, de 57 años. La alarma de su desaparición saltó el pasado miércoles, cuando el hermano acudió a la comisaría para presentar la denuncia. La Policía Nacional la catalogó como sospechosa e "inquietante" y de alto riesgo. El viernes trascendieron testimonios sobre el estado mental de la mujer. Las autoridades han decidido labores de rastreo en Ourense y Trives, donde tiene una casa rural.

Ayer, Policía Nacional, Policía Local y Protección Civil realizaron batidas a pie por el entorno del barrio de O Vinteún. No apareció ningún indicio. El Helicóptero así como la unidad canina de Madrid, especializada en hallar cuerpos, se suman esta mañana.

Por ahora, "todas las hipótesis se mantienen abiertas", reitera la comisaría, desde la marcha voluntaria, a un suicidio, un accidente e incluso un crimen. Belén Rodríguez participaba en grupos sectarios que predicen el fin del mundo, aunque considerados como "no destructivos". No obstante, los investigadores de la Policía Nacional en Ourense también tomaron declaraciones en este entorno.