Riesgo de fuga y de reiteración delictiva. Estos fueron los argumentos precisados por la titular del juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo para mantener en prisión preventiva a Carlos Inacio Pinto, el millonario portugués acusado de intentar matar a su mujer con un mazo en la habitación de un hotel de Vigo en mayo de 2016. El ciudadano luso continuará así en el penal de A Lama, en el que permanece desde hace ocho meses. Esta decisión fue recurrida por la defensa a la Audiencia Provincial, que deberá ahora pronunciarse sobre la puesta en libertad del investigado. Se trata del segundo intento de la defensa de Inacio Pinto para lograr su salida de prisión.
Su letrado mostraba ayer su disconformidad con la decisión tomada por la magistrada al considerar que no se tuvieron en cuenta las diligencias que se practicaron en los últimos meses ni tampoco las pruebas testificales que se recogieron de empleados del hotel y otros testigos. Precisamente una de estos últimos testigos, quien aseguró haber visto a la esposa de Inacio con la maza en el bolso el día antes del suceso en un bar de Samil, está también siendo investigada por el juzgado para contrastar la veracidad de su declaración. La acusación particular ha solicitado una nueva declaración en sede judicial de esta persona.
