La Policía Nacional detuvo a dos mujeres y un hombre por supuestos delitos relacionados con la prostitución, contra el derecho de los trabajadores y coacciones y amenazas. Las investigaciones se iniciaron al detectar agentes de la comisaría de Santiago que varias mujeres de origen colombiano estaban "ejerciendo la prostitución en condiciones severas" en Noia.

Los arrestados ofrecían a sus víctimas el acceso a España facilitando los recursos económicos y el pago del pasaje que luego obligaban a las jóvenes a abonar por medio de la prostitución. Cuando estas mujeres se convertían en conocida en la zona, los apresados las enviaban a pisos de Pontevedra para que siguieran con la prostitución y no ser reconocidas.