El robo de cinco cuadros del pintor irlandés Francis Bacon en una vivienda de Madrid levantó una gran expectación al tratarse del mayor hurto de arte contemporáneo en España en los últimos tiempos. En un primer momento se dio captura en mayo de 2016 a siete presuntos asaltantes y ayer la Policía Nacional detuvo a otras tres personas vinculadas con estas sustracciones. Esta banda itinerante formada por al menos una decena de integrantes -la investigación aún no se da por concluida -era especialista en el robo de cuadros. Sin embargo también fueron arrestados como presuntos autores de seis asaltos en viviendas y establecimientos de Galicia, concretamente tres en Vigo, dos en A Coruña y otro más en Ourense. A este grupo organizado también se le atribuye otros diez saqueos en la Comunidad de Madrid y en Cataluña. No trascendió en que zonas de Vigo perpetraron sus asaltos y si también fueron pinturas lo que se llevaron de los tres robos.

Estas últimas tres detenciones tuvieron lugar en la capital madrileña, donde además se procedió al registro de seis domicilios (cuatro en el centro, uno en el municipio de Arroyomolinos y otro en Valdemaqueda). En la inspección de estas viviendas se incautaron una pistola, munición, un equipo de oxicorte (técnica similar a la soldadura), guías para la apertura de cajas fuertes, inhibidores de frecuencia, llaves falsas, dispositivos láser de medición y otros aparatos diseñados para la apertura de las puertas. A pesar de los registros, el paradero de las cinco pinturas de Bacon sigue siendo un misterio, ya que todavía no fueron halladas por los agentes. Fuentes policiales aseguran que "en los asaltos empleaban métodos muy precisos y sofisticados", a tenor de lo localizado en las viviendas de los detenidos.

Todos los arrestados son de mediana edad y cuentan con antecedentes por delitos similares, según precisaron fuentes de la investigación, quienes subrayan que la operación continúa abierta para tratar de localizar a más posibles implicados y dar con el paradero de los cuadros. Se sospecha que no pudieron salir de España.

La operación fue desarrollada por agentes de la Comisaría General de Policía Judicial, de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, de la Subdirección General de Logística, de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña y de la Jefatura Superior de Policía de Galicia.