Una mujer de 68 años falleció ayer atropellada por su propio vehículo, del que se había bajado para tirar la basura, según informó el Servei Català de Trànsit. La sexagenaria aparcó su coche en la calle Progrés de Sant Jaume de Llierca (Girona) y cuando descendió del mismo se percató de que éste empezaba a moverse, por lo que intentó pararlo con la ayuda de una vecina, pero la inercia del turismo provocó que acabara atropellada. Ocurrió por la mañana.