Las pruebas se acumulan contra Flavio J.D.S., el brasileño de 19 años que ingresó en prisión acusado del asesinato del empresario ourensano Luis Fernández, de 66 años, que apareció degollado en Maspalomas (Gran Canaria), donde residía. La Policía Nacional da por esclarecido el crimen: además de reconocer el joven "de forma voluntaria y espontánea" al ser detenido que él era el autor, los agentes hallaron, en uno de los vehículos de la víctima, las dos armas que el chico supuestamente usó en el homicidio. Se trata de una figura decorativa con la que supuestamente golpeó al sexagenario en la cara y unas tijeras manchadas de sangre con las que a continuación lo apuñaló en varias partes del cuerpo causándole la muerte. Una fuerte discusión desencadenó la agresión mortal. El joven vivía con la víctima en Gran Canaria desde principios de este octubre tras haberse conocido hace unas semanas en Madrid.

Flavio J.D.S, que carece de antecedentes, fue detenido la madrugada de este pasado martes sólo ocho horas después de que se hallase el cadáver del empresario. Estaba en una parada de autobuses próxima a un hospital de la localidad de Meloneras. No opuso resistencia y confesó ser el autor material del crimen. También fue arrestado su encubridor, Kevin H.C., español de 24 años y con antecedentes.

La investigación arrancaba a las diez de la noche de este pasado lunes. Fue en ese momento cuando la Policía Nacional tenía conocimiento, a través de unos testigos, de que un brasileño llamado Flavio había confesado haber dado muerte a un conocido empresario afincado en el sur de Gran Canaria. Con esta información esa misma noche los agentes acudían a la avenida de Gáldar de la localidad de San Fernando de Maspalomas, donde en una oficina de un almacén de la víctima efectivamente hallaron el cadáver del ourensano. El cuerpo estaba boca arriba, tenía evidentes signos de violencia y presentaba una servilleta doblada sobre el rostro.

Las pesquisas para dar con el asesino se iniciaron con entrevistas con personas del círculo del empresario, que confirmaron a los investigadores la relación que existía entre la víctima y Flavio y que vivían juntos desde principios de este octubre.

Además de alertar inmediatamente a todos los puertos marítimos y aeropuertos de la isla de Gran Canaria, los investigadores avisaron a las unidades policiales de servicio, que comenzaron una exhaustiva búsqueda de Flavio.Y los rastreos dieron resultado a las seis de esa madrugada, cuando el joven fue localizado y arrestado.

Las pesquisas permitieron determinar que la víctima conoció al fallecido hace unas semanas en Madrid y que se vinieron para Gran Canaria para vivir juntos. El crimen ocurría la tarde del lunes, el mismo día que horas después se halló el cuerpo. Según la Policía Nacional, hubo una fuerte discusión entre ambos que llevó a Flavio a matar al empresario.

El brasileño huyó en una furgoneta de la víctima y la cambió después por otro vehículo también de Luis Fernández. Su intención era ir hacia el aeropuerto y escapar de la isla, pero como no tenía dinero fue a casa de un amigo, Kevin, y le confesó el crimen. Este chico lo acompañó al almacén para recoger las armas usadas en el asesinato, así como unas joyas que llevaba el fallecido. Y el joven también fue con Flavio a la vivienda del empresario para que se cambiase de ropa y cogiese dinero para la fuga. Pero la huida se frustró. Y los agentes recuperaron además en uno de los vehículos del sexagenario las pruebas clave: la figura y las tijeras usadas en el crimen, las joyas y dos toallas impregnadas en sangre.