"Siempre creí en la justicia; acepto la pena pero solo pido protección para mi hijo y mi familia". Entre sollozos pero sin llegar a asumir los hechos de los que se le acusan, Víctor Luis T. J. aceptó sin embargo un acuerdo de conformidad y fue condenado a 5 años y un día de prisión por intentar matar a su sobrino con una catana en Sárdoma (Vigo). El procesado no podrá acercarse ni comunicarse con la víctima durante seis años y deberá indemnizarla con 12.328 euros.
La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, acogió ayer la vista, que se resolvió con un pacto entre las partes. El fiscal rebajó su petición de cárcel de los 12 años y medio iniciales a 5. Lo hizo tras modificar también la calificación de los hechos, que pasaron de un delito intentado de asesinato a otro de tentativa de homicidio.
Mientras le leían los términos de la conformidad, que es firme ya que acusación y defensa renunciaron a recurrir, el acusado pidió de forma insistente a magistrados, fiscal y letrados "protección" para su familia, asegurando que recibían "una fuerte presión y amenazas" por parte de la víctima. "Le están haciendo daño a mi familia. Solo quiero que la dejen en paz", sollozaba el acusado, quien a su vez, planteó la posibilidad de interponer una denuncia por las supuestas presiones que reciben sus parientes.
Víctor Luis T.J. , quien lleva un año en prisión provisional, a pesar de aceptar la pena no asumió la culpabilidad de los hechos asegurando no haber causado "daño a nadie". También reiteró la inocencia de su hijo, que a pesar de no constar en esta causa, la Fiscalía sí entiende que fue él quien colaboró con el procesado en el ataque a su sobrino y así lo hizo saber en su escrito de acusación. "Mi hijo no estaba allí y tampoco quiero que lo impliquen, está fuera de esto", aseveró entre lágrimas.
El varón, que solo demandaba seguridad y protección para sus familiares, decidió escuchar la acusación del fiscal y aceptar finalmente los 5 años y un día de condena además de los 12.328 euros de indemnización. Alegó no tener dinero para hacer frente al pago señalado, a lo que el magistrado le instó a que lo cubra cuando comience a trabajar o a recibir ingresos.
Golpes en cuello y espalda
Los hechos por los que tendrá que ingresar en la cárcel se remontan a julio de 2014. Acusado y víctima vivían en el poblado gitano de Sárdoma, en Vigo. Sobre las 13.00 horas del día 14, el acusado en común acuerdo con su hijo, a quien no afecta el procedimiento por encontrarse en paradero desconocido, atacaron a su sobrino, que responde a las iniciales J.T.J., con una catana.
Según el fiscal, mientras el hijo agarraba de frente por los brazos a la víctima, Víctor Luis T.J. le atacó con una catana propinándole un fuerte golpe en la espalda mientras éste le gritaba que no lo matara. El acusado prosiguió con los golpes, que se entremezclaban con las súplicas del sobrino, hasta que éste interpuso su brazo y detuvo un golpe dirigido justo a su cuello. En el momento en el que J.T.J. logró zafarse del golpe, intervino la novia de éste en su ayuda, quien sujetó a Víctor Luis impidiendo que le propinase más golpes a la víctima.
A consecuencia de estos hechos, el sobrino del acusado sufrió importantes heridas a nivel torácico y muscular además de una herida en el antebrazo que precisó de intervención quirúrgica con su consiguiente ingreso hospitalario. Según se recoge en el escrito de acusación, éste necesitó más de tres meses para su curación. Además, le quedaron secuelas estéticas y se le agravó un estado de ansiedad previo, motivos por los que se establecen las indemnizaciones correspondientes a los 12.300 euros.
El acusado aseguró no importarle pasar cinco años en prisión mientras su familia esté protegida de "ellos" , en relación a la víctima y sus familiares.
