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Una joven canguesa denuncia por agresión sexual en Senegal al coordinador de una ONG

Asegura que sufrió durante tres horas tocamientos y que no pudo defenderse por miedo al estar en un país extranjero y musulmán -La Fiscalía ya abrió diligencias previas

Una joven de Cangas, X.P.L.,mayor de edad, presentó el jueves ante la Fiscalía de Pontevedra una denuncia por agresión sexual y estafa contra el coordinador de la ONG "África y Punto" (Ahora denominada Coperación y Desarrollo), Giomar Murías Fernández, natural de Tarrasa. La ONG realiza labores humanitarias en Senegal

La Fiscalía abrió diligencias y se propone investigar los hechos que denuncia la joven de Cangas y que transcurrieron en Senegal. La víctima dio a conocer la denuncia a través de las redes sociales, donde obtuvo muestras de solidaridad.

La vecina de Cangas relata en su denuncia que ella y una amiga se pusieron en contacto con la organización a través de internet, contactando con Giomar Murías, quien les indicó que deberían abonar unas cantidades, mediante su ingreso a través de Western Unión. "Al decirle que en Cangas del Morazo no había esa alternativa me facilitó un número de cuenta para hacer la transferencia por la reserva, por un importe de 100 euros. Esto sucedió en los meses de enero/febrero de 2016". Asegura que facilitó su nombre y un número de cuenta, "pero ahora sospecho por una conversación mantenida con otras voluntarias en Senegal, que esa cuenta no era de su titularidad, sino que puede ser de su abuela. Posteriormente tuvimos que abonar 270 euros para nuestra manutención y 230 para excursiones, que en teoría eran para ayudar a la organización. La colaboración como voluntaria se desarrollaría en Senga, región de Kéndougou, lugar de Dimboli".

La presunta víctima expone en su denuncia ante la Fiscalía que durante las cuatro semanas de estancia en la ciudad de Kedougou todo se desarrolló con normalidad, aunque no era lo previsto. "En ocasiones, como Giomar no entregaba dinero a la familia, ésta no nos podía dar ni comida ni agua. Nuestra tarea consistía en atender y enseñar a los niños de la familia y allegados".

Fue la noche del 28 al 29 de julio, previa al regreso de Dakar, según señala en su denuncia, cuando el coordinador español, supuestamente, se metió en su cama, con el argumento de que no tenía donde dormir. "Nosotras ocupábamos una cabaña dentro de las distintas estancias de la casa de la familia de su esposa senegalesa. Sobre las tres de la mañana me desperté porque Giomar estaba sometiéndome a tocamientos de toda índole. Soporté la agresión sexual por miedo, pues era de noche, estaba en un país extraño y musulmán y no podía imaginar qué reacciones se podían producir ante esa situación, haciéndome la dormida (mi compañera dormía de verdad y no se enteró de lo que pasaba) por lo que no me enfrenté al individuo. Esta situación duró tres horas hasta las seis de la mañana, en que la madre de la familia abrió la puerta de la habitación para coger arroz y, al dejarla abierta, Giomar dejó de molestarme. Al cabo de un rato me marché y me quedé dormida hasta las nueve".

Afirma la joven canguesa que comentaron los hechos a la familia senegalesa y que hicieron sentarse a Giomar delante de ellas. "Giomar no niega lo sucedido y me pide disculpas, pero el padre de la familia le advierte que los sucedido es muy grave porque soy una extranjera que iba a ayudar a su casa y que él es musulmán y tiene mujer.", manifiesta.

X.P.L. afirma que "una vez regresé a España lo comente con mi entorno cercano, quien me aconsejó denunciarlo y hacer públicos los hechos para que no le sucedan a ninguna otra mujer de las muchas que van al país senegalés como voluntarias".

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