Las carreteras de las comarcas se han cobrado la segunda víctima mortal en lo que llevamos de año. Una vecina de A Bandeira falleció ayer en un siniestro en la N-525 a la altura de la fábrica de la empresa Nudesa. Milagros Taboada, de 81 años de edad, viajaba de acompañante en un turismo junto a dos personas más. Por causas que se desconocen el conductor perdió el control del Fiat Punto, con placas 2206-BPD, y, tras precipitarse por un terraplén, acabó empotrándose contra una casa.

El accidente se produjo minutos antes de las dos de la tarde y supuestamente los tres ocupantes se dirigían a la localidad trasdezana en la que residía la mujer fallecida. Hasta este punto se desplazaron dos ambulancias asistenciales y una medicalizada del 061, así como un helicóptero. Los tres heridos fueron atendidos por personal sanitario del Punto de Atención Continuada de Silleda. También participaron en el operativo efectivos del parque intercomaral de bomberos y agente de la Policía Local. En un primer momento los servixcios de emergencias ya alertaron de la gravedad de las heridas de la octogenaria, que, según fuentes del 601 ya falleció en el mismo lugar del siniestro. Los otros dos ocupantes, un varón y una mujer, ambos de 71 años, fueron trasladados al Hospital Clínico de Santiago y en principio sus heridas no revestían gravedad. Los heridos son: M.J.G.P. , sobrino de la finada y T.T.P.

Milagros Taboada era muy conocida en A Bandeira, donde tiene varios hermanos y numerosa familia. Su marido, conocido como Albino de Pena, había sido monitor de autoescuela y también falleció hace tiempo. La pareja no tenía hijos y la fallecida acudía con mucha frecuencia a la casa de una de sus hermanas, la propietaria del conocido hotel Victorino de la localidad. Una parte de su familia reside en la ciudad de Pontevedra.

La noticia del trágico fallecimiento de esta vecina trascendió a media tarde en Trasdeza y causó consternación en A Bandeira, donde era muy conocida ella y su extensa familia. Además, esta es una localidad en la que muchos de sus habitantes están emparentados entre sí.