Para captarlas les prometían trabajo en España como empleadas de servicio doméstico, pero nada más pisar el país se convertían en las "esclavas sexuales" de una organización que las obligaba a entregar su cuerpo en prostíbulos sadomasoquistas de Oviedo, uno de ellos considerado todo un referente para este tipo de prácticas en el norte de la península. Después de una larga operación, la Policía Nacional ha logrado desarticular una trama de trata de mujeres con la detención de diez personas presuntamente implicadas en un turbio negocio con sede en la capital asturiana. Nueve de los diez detenidos -tres hombres y siete mujeres- fueron sorprendidos en Oviedo y el otro en Madrid. En total hubo registros en cinco inmuebles, donde se intervinieron "multitud de archivos" de la banda.

Atendiendo a la información que manejan los investigadores, su día a día era terrible. Estaban obligadas a estar disponibles para la organización las 24 horas del día y los siete días de la semana. Como único respiro tenían un descanso de dos horas por jornada si es que no había mucho trabajo. Su vida era de semiesclavitud, aunque la red que las dirigía amasaba ganancias que "superaban en medio millón de euros por año".