La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha dictado una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión contra José Luis F.F., un vecino de la ciudad olívica condenado por intentar violar a una prostituta, después de que no ingresase en la cárcel para cumplir este fallo judicial tras ser requerido formalmente para ello. La medida fue adoptada hace un mes, el 19 de abril. Sentenciado a dos años y medio de prisión por estos hechos, el hombre ya tenía en su historial delictivo otra condena por agresión sexual ocurrida hace más de una década.
De 52 años, natural de Lugo aunque con domicilio en Vigo, la sentencia por la que José Luis F.F. debe ingresar en A Lama tiene fecha de 10 de noviembre de 2015 y fue dictada in voce en la propia sala tras alcanzarse un acuerdo de conformidad entre la defensa y la Fiscalía en virtud del cual el acusado asumió la autoría de los hechos. Además de los dos años y medio de cárcel como autor de un delito de agresión sexual, con la concurrencia de la circunstancia agravante de reincidencia y la atenuante de reparación del daño -abonó parte de la indemnización antes de la vista-, se le impuso una multa de 60 euros por una falta de lesiones. Como indemnización a la víctima por los días de baja y los daños morales causadas se fijó la cantidad en 1.313 euros.
A raíz de esa sentencia ya "definitiva y firme", según consta en la resolución, se puso en marcha el procedimiento de ejecución de la misma. El condenado pidió el beneficio de la suspensión de la pena de cárcel, pero el tribunal rechazó concedérselo, por lo que fue requerido para ingresar en prisión.
Tras no comparecer de forma voluntaria en la cárcel se ha dictado esta orden de búsqueda y detención para dar cumplimiento a la sentencia. Los hechos por los que fue condenado ocurrieron la noche del 3 de octubre de 2013 en la calle Jacinto Benavente de Vigo, cuando el hombre contactó con una mujer que ejercía la prostitución en esa zona y acordó mantener relaciones sexuales con ella. Ambos se subieron en el vehículo en el que viajaba él -propiedad de su esposa- y fueron primero a un bar de Travesía de Vigo.
Agresivo
Después volvieron al coche, pero el hombre comenzó a ponerse agresivo y agarró a la mujer, llegando a taparle los ojos con una especie de capucha. Cerca de la calle Figueiró ella logró zafarse, salió del turismo y fue a unos portales a pedir ayuda. Pero como nadie le abrió la puerta se dirigió hacia la carretera, momento en el que el condenado volvió a encontrarla.
Allí, se refiere en la sentencia, la agarró del pelo, la arrastró por el suelo y la llevó a una zona de monte, donde le arrancó el cinturón y el botón del pantalón y le dijo que la iba a violar, dándole un beso a la fuerza. Hubo un forcejeo entre ambos que concluyó cuando llegó una patrulla policial, ya que una vecina que había escuchado los gritos de la víctima dio la alerta.
