| Un chófer cuyo camión se empotró contra una casa, deshabitada en el momento del siniestro, en el municipio ourensano de Ramirás, se pasó ayer dos horas y media atrapado en el vehículo y con riesgo de derrumbe de la vivienda. El conductor, de unos 25 años y vecino de Pontevedra resultó herido grave, mientras que su acompañante, una joven que pudo salir por su propio pie de la cabina tras el impacto, sufrió una lesión en la muñeca. Ambos fueron hospitalizados.