Después más de doce horas en los juzgados de Cangas, el juez ha decretado prisión provisional y sin fianza para Sinaí Giménez y sus hermanos Saúl y Juan Paulo. Los patriarcas del clan, defendidos por el abogado vilagarciano Ramón Montenegro, quedaron en libertad provisional con la obligatoriedad de comparecer cada quince días. Olegario Giménez comparecerá mañana, previsiblemente, en calidad de investigado.
El fiscal pidió prisión para todos Los Morones detenidos en el marco de la Operación Vida. En cambio, no lo solicitó para el responsable de la gestoría ni para el secretario de la cooperativa.
Sinaí Giménez fue de los primeros en comparecer ante el juez, aunque se desconoce sí llegó a testificar. Los que sí se han acogido a su derecho de no prestar declaración ante el magistrado han sido sus dos hermanos Saúl y Juan Paulo, tal y como ha confirmado el letrado García Montes cuando abandonaba las dependencias judiciales de Cangas. El ritmo de las declaraciones provocó que la jornada finalizase minutos antes de la medianoche. .
La caja fuerte incautada en el domicilio de Los Morones, a su llegada al Juzgado de Cangas
Alrededor de las 18:00 horas llegó al Juzgado de Cangas la caja fuerte requisada en el registro de las viviendas de los morones en Amorín, en Tomiño. Los detenidos se habían negado a facilitar su clave y se supone será abierta hoy en las dependencias judiciales.
Entre tanto, a las puertas del juzgado se vivieron momentos de tensión cuando la Guardia Civil se vio obligada a cortar el paso a un grupo de allegados de Los Morones que pretendían salir por un camino cortado por las fuerzas de seguridad.
Llegada de Los Morones a los juzgados de Cangas // G.Núñez
Gritos de apoyo para el 'príncipe'
Sinaí Giménez y otros miembros de la familia detenidos el pasado martes llegaban al edificio con enormes medidas de seguridad. El autoproclamado 'príncipe de los gitanos' salió del furgón policial y gritó al público: "Zamoranos violadores".
También llegó a los juzgados de Cangas Juan Paulo Giménez, hermano de Sinaí Giménez, que a su salida del furgón policial cargó verbalmente contra los agentes policiales señalando: "Esto es lo que pasa por denunciar a la Guardia Civil".
Después de que los detenidos entrasen en el edificio, una veintena de 'morones' se agolparon en la entrada de los juzgados al grito de "injusticia".
Expectación
Minutos antes de su llegada, el abogado José Luis Gutiérrez Aranguren mostraba su "sorpresa" porque la causa sea "secreta". Aseguró que se enteró de lo acontecido "por los medios de comunicación".
Cangas está totalmente blindada para evitar que la toma de declaraciones de Los Morones avive el conflicto. Un fuerte dispositivo policial vigila el entorno de los juzgados, así como los puntos de acceso a la villa.
