La Fiscalía de Pontevedra solicita 4 años de prisión para Vivencio R.O. por un presunto delito de estafa continuada del que habrían sido víctimas varios concesionarios de automóviles de la provincia en concurso con otro de falsedad en documento privado; así como multa de 4.500 euros y que indemnice a las distintas financieras con cantidades que suman los 126.375 euros supuestamente estafados.

El Ministerio Público apunta que el acusado se habría especializado en adquirir vehículos a través de operaciones de financiación que luego no se abonaban. Para cubrirse las espaldas utilizaba documentación de una tercera persona que habría sido modificada o alterada.

Así, según el fiscal, Vivencio R.O. ideó este plan para conseguir vehículos a motor sin abonar su precio de compra, en perjuicio sobre todo de las entidades financieras. El acusado se valió de una mujer declarada en rebeldía, J. J. A. L., quien, siguiendo el plan supuestamente diseñado por el acusado, solicitaba la financiación de los vehículos aportando nóminas alteradas con el conocimiento de Vivencio, quien en una ocasión incluso actuó sin la intervención de esta persona.

Así se hizo con cinco vehículos de los que, al menos dos de ellos, fueron localizados posteriormente en Francia. El primero lo adquirió el 4 de mayo del pasado año en automóviles Filgueira de Vilaboa. El Peugeot para el que se solicitó un préstamo de 20.146 euros se compró a nombre de J. J. A. L. Pero, según el fiscal, él mismo lo recogió y firmó al recibirlo usando un nombre y un DNI distinto al suyo.

Para obtener la financiación, se aportaron unas nóminas a nombre de J.J.A. L. en las que, además de alterar el concepto salarial (se hizo constar un salario de 1.420 euros en lugar del real de 828 euros), se imitó la firma de la empresaria. No se abonó ninguna cuota del préstamo ni se recuperó el coche.

El acusado, según la acusación, repitió "modus operandi" en el concesionario Vepersa con un Volkswagen Golf para el que se solicitó un préstamo de 27.184 euros. Este concesionario de Mourente, o mejor dicho las financieras de Volkswagen, fueron víctimas por partida doble de este presunto estafador. Y es que el año pasado Vivencio R. formalizó la compra de un Tiguan valorado en 22.212 euros. Se pagaron las dos primeras cuotas del préstamo y el coche nunca se recuperó.

En abril de 2015, Vivencio también actuó en dos concesionarios de Vigo. Allí, en Talleres Rodosa y en Camelias Motor utilizó también las nóminas alteradas a nombre de la mujer para obtener la financiación de otros dos vehículos. En el primero se hizo con un Megane para el que se suscribió un crédito de 23.885 euros. En el segundo con un Honda por el que dejó de abonar a la financiera 27.389 euros.