La fuerte discusión de una expareja que coincidió en un bar de la calle Portela en Vigo, acabó con el joven detenido por un supuesto delito de malos tratos y agresión al padre de su excompañera sentimental que salió en defensa de su hija y acabó con numerosas heridas en la cara.

La versión de ambas partes el Juzgado de Violencia fue contradictoria. Mientas la joven aseguró que su expareja pegó puñetazos en la cara a su padre cuando se les acercó, el joven aseguró que le dio un cabezazo porque le tenía sujeto por detrás e iba a ser agredido. La magistrada le dejó en libertad con cargos a la espera de que declaren los testigos del bar.