Una empleada de hogar que acusó a su jefe de haberla sometido a abusos sexuales durante casi cuatro años, confesó ayer ante la magistrada que iba a juzgarla por denuncia falsa que se inventó la denuncia que presentó ante la comisaría de Vigo. Inicialmente el fiscal pedía para la acusada, CG.R.S., una pena dos años de prisión y multa de 3.240 euros, así como una indemnización para el hombre de 2.000 euros por los daños morales causados. El acuerdo de conformidad llevó a una rebaja de la pena.

La acusada denunció a su empleador "con plena consciencia de la falsedad del relato", según el fiscal, en enero de este año. Aseguró que dos días antes había sido violada en el domicilio donde trabajaba y que entre 2008 y 2012 había sufrido varias agresiones sexuales. Expuso que su jefe le decía que si no accedía no le pagaría el salario y que si denunciaba la mataría. Todo resultó ser falso.