Una de las hijas de Lupe Jiménez pidió ayer "perdón" a todos los participantes en el juicio por este crimen tras la agresión al acusado que protagonizaron familiares de la fallecida el pasado miércoles. No obstante, aclaró que este perdón no era extensivo a su padre, que fue agredido: "Le pido perdón a todas las personas que estábamos allí, menos a él", resumió.

"Fue mucho lo que aguantamos, fueron dos años esperando, ha sido mucho coraje el que tenemos acumulado", explicó Esmeralda, que tiene 18 años y está embarazada, quien ha continuado precisando: "Le pido perdón a todas las personas que estábamos allí, menos a él".

Del mismo modo, la mujer ha rechazado el perdón que en la primera sesión del juicio pidió el acusado a sus hijos. "Ya por muchos perdones que haya, ella ya no está aquí, y él está respirando y está comiendo. Solo quiero decirle que jamás en la vida va a abrazar a sus hijos", un deseo que expresó el acusado durante la primera jornada del juicio, pero que ellos no parecen estar dispuestos a cumplir tras repudiarlo.